El aumento de las emisiones de CO2 registradas en España el año pasado (que fue del 25% para el sector eléctrico y del 6% para el conjunto de las actividades) se debió a que las empresas eléctricas incrementaron indebidamente la producción eléctrica con carbón, según un informe de Ecologistas en Acción.
Esta organización considera que las eléctricas hicieron un uso “ilegal” del real decreto del año 2010 que autorizaba el uso del carbón nacional. En realidad, explican, sólo se aprovechó menos del 50% del carbón nacional previsto, y que en total, el 70% eral carbón de importación.
Esto hizo que (pese a la crisis, el descenso de actividad económica y el menor consume de combustibles en el transporte) las emisiones globales de gases aumentaron un 6% aproximadamente, según un estudio de José Santamarta.
“Las eléctricas han antepuesto sus intereses por encima de todo. Y el resultado es un fortísimo incremento de emisiones”, dice Francisco Ramos, portavoz de Ecologistas en Acción.
Según su interpretación, se recurrió al carbón importado porque es más barato, y, además, las eléctricas optaron por él, y relegar el gas, para aprovecharse de la actual situación que hace que los precios del pool eléctrico se conformen con los modos de producción más caros.
“Lo que ha ocurrido con el incremento de las emisiones de CO2 por el carbón va en contra de toda lógica y de las políticas europeas de lucha contra el cambio climático”, dice Francisco Ramos, de Ecologistas en Acción. “Y lo que ha ocurrido no ha sido tanto debido al decreto, sino a su mala aplicación”, expone. La organización estudio presentar demandas por estos incumplimientos.
Ramos indica que cuando se aprobó el referido decreto se perseguía favorecer el carbón nacional y se partía de la base de que no habría un incremento significativo de las emisiones, ya que el uso del carbón nacional debería compensarse con una reducción de producción eléctrica que se aplicaría sobre las otras instalaciones térmicas emisoras de CO2. El ministro de Industria debía analizar, además, el impacto del decreto en la comisión delegada del Gobierno para el Cambio Climático.
Pero todo esto no se ha cumplido; “y se continuado quemando carbón de importación, además del carbón nacional”. El resultado es que la generación con carbón se ha incrementado en casi un 100%” respecto a 1990, dice Ramos. Se pasado de generar 21.000 GWh en 2010 en térmicas con carbón a superar los 42.000 GWh en el 2011.
Esto ha supuesto que las centrales de gas de ciclo combinado, que tienen menores emisiones de CO2 por kWh generado, hayan visto reducida su producción en unos 13.500 GWh (una reducción del 21 % respecto al 2010).
Lo que a juicio de esta organización es más “inexplicable” es que a partir del mes de agosto se puso fin a la tendencia de ir introduciendo cada vez más generación con carbón nacional, para ser sustituido por carbón importado. Y una vez finalizado el año, y con los datos del Sistema de Información del Operador del Sistema, se ha comprobado que la cantidad acumulada en el año referida al uso del carbón nacional se ha quedado en 12.773 GWh, es decir, únicamente un 55% de los 23.346 GWh, que era el valor máximo fijado para el 2011. “Esto supone la utilización de unos 5,5 millones de toneladas de carbón, en lugar de los 10 millones previstos”, dice Ramos.
“Es decir, se duplica la producción con carbón, se incrementan de forma importante las emisiones, y, además, se hace en base a carbones de importación, que suponen e total una participación en la generación eléctrica del orden del 70%. Si esa generación eléctrica hubiese sido absorbida por las centrales de gas de ciclo combinado, hubiese supuesto unas emisiones evitadas de CO2, del orden de los 17 millones de toneladas”, agrega Ramos.
Fuente: Lavanguardia.com
Por: Antonio Cerrillo.
Publicada: 10 de enero de 2011.