Debido al cambio climático o a la pesca ilegal, diversas especies han desaparecido.
Recientemente se han implementado programas de preservación de especies en peligro de extinción y han contribuido a la reducción de la desaparición éstas.
Entre esas especies, algunas son consideradas como endémicas, lo que quiere decir, que tienen su distribución restringida a un territorio determinado y además no se encuentra en de forma natural en otra parte del mundo.
Un ejemplo claro es la extinción en México de 19 especies endémicas, como el toqui pinto de Guadalupe, el carpintero de pechera de Guadalupe, el salta roca de San Benedicto y el gorrión bigotudo, de la Isla de Todos los Santos, en Baja California.
Ajolote
Otra de las especies amenazadas en México es el ajolote es una salamandra cuya característica principal es que conserva sus rasgos larvales en su vida adulta.
El ajolote es un animal que tiene tres formas de respirar: a través de las agallas, los pulmones y por la piel.
Está comprobado que el ajolote pierde una pata o incluso una parte del ojo, éste puede regenerar su cuerpo y volver a quedar completo.
Esta especie es un habitante que tiene miles de años en la tierra sobre todo en el Valle de México. Fue adorado por los aztecas y se está resistiendo a morir.
De acuerdo con el Instituto de biología de la UNAM, en 1998 por cada kilómetro cuadrado del canal de Xochimilco-lugar endémico de estas criaturas- había 6 mil ejemplares; entre los años 2000 y 2004, disminuyeron a 1 mil; en 2008 a 100 ajolotes y hasta la fecha se calcula que solo quedan 30 de ellos.
En 80 kilómetros que tiene el canal de Xochimilco, solo habría 2 mil 400 ajolotes o menos. Su extinción se debe a los incentivos de producción de la zona de impuestos por el ex presidente de México, Luis Echeverría (1970-1976), quién ordenó la introducción de la tilapia y la carpa, dos especies invasoras que comenzaron a depredar a los ajolotes.
Vaquita Marina
La vaquita marina es una de las especias más amenazadas de México, algunos expertos señalan que quedan 30 ejemplares y se encuentran en las costas mexicanas.
La especie ha ido desapareciendo debido a la pesca ilegal de la totoaba, una especie marina protegida y también en peligro de extinción. Llega a medir hasta dos metros de largo y su pesca afecta a la vaquita marina.
El producto de totoaba se vende hasta en 8,000 dólares por kilo en el mercado negro de China donde erróneamente se le atribuyen propiedades afrodisiacas, detalló Semarnat en un comunicado de febrero.
Después de crear un refugio para la protección de la vaquita marina, en 2007 se habló de que existían 150 ejemplares pero 10 años después y tras 1,200 millones de pesos invertidos, hay únicamente 30 y una alerta encendida ante su próxima extinción.
El gobierno mexicano se ha puesto las pilas y ha implementado un plan de emergencia para salvar a la vaquita marina.
Recientemente, un video que de inmediato se volvió viral en las redes sociales permitía observar a un ejemplar de vaquita marina junto con su cría, muy cerca de la zona de Refugio de Protección de la Vaquita Marina. Las vaquitas marinas fueron captadas en fotografías y video por Marcus Wernicke, un residente del Puerto de San Felipe que se encontraba cerca de la zona practicando pesca deportiva.