Cuando Jacqueline Suriano se enteró de que la parálisis presupuestaria de Illinois podría costarle 2,360 dólares más en sus estudios este semestre vivió la vorágine. Pero sus problemas se han resuelto. Wayne Randall, un completo desconocido, decidió donarle el dinero para cubrir ese monto.
«Sentí que todo ese estrés se desvanecía», dijo Suriano. «Creo que voy a tener que enviarle una foto enmarcada de mí con mi diploma cuando termine».
La falta de acuerdo presupuestario en Illinois ha congelado los fondos estatales para las subvenciones que suelen concederse a miles de estudiantes universitarios de bajos ingresos. Mientras que algunas escuelas han aportado ese dinero a la espera de que se liberen los fondos, muchos estudiantes están confundidos ante la posibilidad de tener que pagar de su bolsillo para cubrir la suma que aportaba la subvención.
Suriano, que asiste a Instituto de Tecnología de Illinois, necesitaba conseguir ese dinero extra en abril para poder inscribirse a tiempo en los cursos del próximo semestre. Ya tiene dos trabajos en el campus (uno administrativo en el departamento de psicología y da clases de yoga) para cubrir los 3,000 dólares que paga por su cuenta cada semestre. Pero no contaba con tener que sufragar además la suma que recibía como apoyo estatal.
Cuando los legisladores del estado interrumpieron las sesiones por las vacaciones navideñas, dejaron sin aprobar el presupuesto (que desde hace seis meses debió haberse fijado), las escuelas comenzaron a notificar a los estudiantes que pudieran ser afectados. En previsión de los costos adicionales, Suriano tomó trabajos esporádicos durante las vacaciones de invierno y renunció a los regalos de Navidad para amigos y familiares. Y con todo no consiguió el dinero suficiente.
Como último recurso, creó una cuenta de crowdfunding en GoFundMe.com donde las personas podían hacer una donación.
Hace unos días, la noche del jueves, Suriano comprobó su correo electrónico y vio que Randall había hecho una donación de 2,500 dólares.
Randall, originario de Memphis, había leído un artículo sobre Suriano publicado por CNNMoney y visitó su campaña de recaudación de fondos, que había reunido un par de cientos de dólares en el último mes.
«Yo sólo trato de devolver el favor cuando veo la oportunidad de hacerlo», explicó Randall. «Había tenido un mal día, pero leer la noticia sobre Jacqueline me lo cambió».
Randall no fue a la universidad. Se matriculó por alrededor de un mes, pero le aburrían las clases, así que la abandonó y consiguió un trabajo en TI a la edad de 18 años. Desde entonces ha estado trabajando. No se arrepiente: ahora posee y dirige su propia empresa de Tecnologías de la Información, NexTek.
Pero no siempre fue fácil. Incluso cuando tenía más de una década de experiencia en el campo, Randall cuenta que no era contratado para algunos trabajos porque no contaba con un título universitario.
Ahora cerca de 130,000 estudiantes universitarios están esperando recibir una subvención del estado de Illinois, pero el dinero aún no ha sido liberado, dejándolos en la incertidumbre.
«Yo fui muy afortunada, pero todavía estoy muy molesta por lo que está pasando y quiero correr la voz por los otros que están en esta misma situación», dijo Suriano.
Cada año, en primavera se les notifica a los estudiantes la concesión de una beca para el siguiente año escolar, pero la letra pequeña dice que la cantidad está sujeta a aprobación. El año pasado, las subvenciones otorgadas daban en promedio 2,800 dólares por estudiante. Los beneficiados, entonces, deciden a qué escuela ir y cuánto dinero deben pedir prestado ese año sobre la base y el supuesto de que recibirán la subvención.
Cuando el presupuesto finalmente sea aprobado, es seguro que el programa de becas también entre en la partida, y los estudiantes como Suriano deberán recibir un reembolso de su escuela. Pero Randall no espera que Suriano le devuelva nada.
«Le dije que lo podría usar para gastos futuros o, con el tiempo, cuando ella trabaje, devuelva el favor a otra persona. No espero nada a cambio», dijo.
Fuente: CNN Expansión