Las grandes, medianas o pequeñas empresas que realmente trascienden son aquellas que están plagadas de responsabilidad social y han dejado un gran sabor de boca a sus grupos de interés, como en el caso de esta panadería que emplea personas con discapacidad.
La panadería que emplea personas con discapacidad
Damor, en conjunto con la elaboración y comercialización de productos de repostería, emplea personas con discapacidad desde hace años, llenando de responsabilidad y amor a cada producto que vende.
La panadería que emplea personas con discapacidad vende galletas, pays, empandas, pasteles, entre otros alimentos que son elaborados por jóvenes y adultos con alguna discapacidad en el taller de repostería de la Fundación de Apoyo para la Educación Especial (FAEE),
De acuerdo con Marcela García de Alba, encargada de Desarrollo Institucional de FAEE, la elaboración de productos de repostería es una actividad que no solo sirve como terapia, también puede ayudarle a las personas con discapacidad a generar recursos.
“Nos dimos cuenta que a los chicos les es mucho más fácil este tipo de trabajo que pueden realizar con las manos. Hace ocho años en FAEE teníamos un taller de elaboración de figuras de barro, y fue ahí donde nos dimos cuenta que ellos trabajan mejor así”, agregó.
En un inicio, la panadería que emplea personas con discapacidad, comenzó con pedidos muy pequeños, hoy en día la popularidad de este comercio creció y ahora cuenta con clientes, etiquetas, y un eslogan que comparte la frase: “el amor hecho postre”.
Tanto la panadería como el taller, cuentan con 16 personas que cumplen con jornadas laborales de dos horas de lunes a viernes.
Marcela García señala que la empresa está pensada y creada para ellos, ya que reconocen que debido al medicamento y a otras circunstancias, algunos de los miembros del equipo se pueden sentir cansados y por ello se generó una jornada laboral de dos horas
“Sabemos esas necesidades y por ello, dependiendo de cómo se sientan, vemos si es pertinente que entren o no al taller de repostería a diario, y si no pueden tomar cualquier otro de los talleres”.
La importancia de programas inclusivos
La asociación también cuenta con diferentes programas de capacitación, como karate, integración sensorial, cuestiones de vida práctica y más, que están enfocados en mejorar la salud de las personas que acuden a este lugar.
Este tipo de programas ayudan a mejorar su proceso de aprendizaje en cuestiones de vida práctica, matemáticas, comunicación y habilidades básicas.
El único requisito para poder inscribirse en alguno de ellos es contar con un diagnóstico de discapacidad intelectual y hacer una cita con algún coordinador de FAEE.
Los talleres pertenecientes a esta fundación son financiados con el dinero recaudado de la venta de los productos que se elaboran en el taller de repostería y de las donaciones.
