Por: María José Evia Herrero
Este martes la famosa revista Rolling Stone dio a conocer su nueva portada. En ella aparece Jahar Tsarnaev, acusado del acto terrorista en el maratón de Boston, ya que la publicación realizó una entrevista a profundidad con el joven de 19 años. La imagen es una fotografía tomada por el propio Tsarnaev, donde parece cualquier cosa menos un peligroso criminal: pelo revuelto, mirada tranquila y una camiseta. De hecho, se parece mucho a otras portadas que Rolling Stone ha publicado a lo largo de los años, destacando a artistas como Jim Morrison, Paul Getty o Madonna en posiciones similares a la de el presunto terrorista.
¡Comparte este post en tu Facebook!
Lo interesante es que esta misma fotografía ya había sido usada por otros medios, entre ellos el New York Times, pero esto generó muy poca retroalimentación negativa. Esto puede deberse a las palabras que acompañaban cada imagen (en el periódico fueron «El lado oscuro, cuidadosamente enmascarado» y en la revista simplemente «El bombardero») o simplemente porque el contexto lo es todo: a pesar de que Rolling Stone ha publicado periodismo de investigación consistentemente, su principal función es escribir sobre estrellas musicales, mientras que la percepción acerca del New York Times es que publica piezas serias sobre acontecimientos importantes.
La respuesta general ha sido de rechazo a la nueva portada: la cadena de farmacias CVS dijo en un comunicado que no venderá la edición de Rolling Stone: «como una empresa con profundas raíces en Nueva Inglaterra y una fuerte presencia en Boston, creemos que ésta es la decisión correcta, por respeto a las víctimas del ataque y a sus seres queridos». Otras cadenas más pequeñas, como Tedeschi Food Shops, Cumberland Farms y Stop & Shop también boicotearán a la revista este mes.
Por su parte, Tom Menino (alcalde de Boston), dirigió una carta al editor de Rolling Stone, que entre otras cosas dice: «su portada del 3 de agosto recompensa a un terrorista con tratamiento de celebridad. Está mal concebida y, en el mejor de los casos, reafirma el terrible mensaje de que la destrucción genera fama para los asesinos y sus ‘causas'(…) Responder con ira nada más alimentará a tu obvia estrategia de marketing. Así que te escribo para centrar el enfoque donde tú debiste hacerlo: en los valientes y fuertes sobrevivientes y en los miles de personas-sus familias y amigos, voluntarios, equipos de primera respuesta, doctores, enfermeras y donadores- que han estado a su lado»
Claro, también hay quienes recuerdan que la publicación es famosa por sus portadas provocativas, como por ejemplo una en los años 70 que mostró al criminal Charles Manson. En el sitio web del periódico The Washington Post, el periodista Erik Temple defendió la decisión de Rolling Stone, diciendo que usarla fue «buen periodismo» porque demuestra que Jahar Tsarnaev es una persona normal con intereses y actividades y que verlo en su «total humanidad» puede ser aún más amenazante.
Si encontraste interesante este post, compártelo en Google+
La historia del ataque en el maratón de Boston no ha terminado de contarse. No sabemos cuáles serán las consecuencias finales y Jahar Tsarnaev no ha sido declarado culpable. La revista Rolling Stone tomó una decisión estratégica de negocios, pero sólo el tiempo dirá si fue la mejor o no. Por lo pronto, la polémica ha devuelto la atención hacia el caso.
Fuentes:
AdAge
The Huffington Post
The Guardian
The Washington Post
The Boston Herald
Creo que todo esto es un tema muy profundo de mercadotecnia y del posicionamiento que tiene la marca Rolling Stone en la mente de las personas. El artículo es una investigación periodística seria que trata de explicar la personalidad del chavo a través de las personas que lo conocían.
Esa misma foto pudo haber estado en la portada de Time o de Newsweek y nadie se hubiera ofendido ni sorprendido, porque estamos acostumbrados a que en esas portadas aparece tanto la Madre Teresa como Osama Bin Laden.
En lo personal no creo que lo esté convirtiendo en una estrella de rock, solo que a cualquier foto que le agregues el logo de Rolling Stone, remite a esa idea, aunque sea la imagen de un gordo o de una mujer muy fea.
[…] para generar cambios en las políticas de una empresa no es nueva: recientemente varias cadenas se negaron a vender la edición de agosto de la revista Rolling Stone y a lo largo de los años Greenpeace ha […]
[…] que también desencadenó actos polémicos en el mundo empresarial. Por un lado, tanto los medios Rolling Stone como el New York Post fueron atacados por sus portadas, y por otro, algunas empresas como Nike […]