A pesar del largo camino que queda por recorrer en materia de equidad de género y de que la brecha salarial aún se encuentra presente en casi todas las ciudades del mundo, muchas empresas han hecho del empoderamiento de la mujer un recurso mercadológico verdaderamente productivo; y es que sin importar qué tan responsables sean estas organizaciones al momento de impulsar el liderazgo femenino eliminando sesgos en puestos directivos, establecer sus políticas de paternidad de manera justa y determinar pagos igualitarios para sus colaboradores sin importar el género, las campañas parecen estar a la orden del día.
Dentro de las más recientes, destaca la campaña «This girl can», lanzada por la organizacion Sport England con el fin de alentar a las mujeres a adoptar el ejercicio como una forma de vida, diversificando los estándares de las deportistas y centrándose en las chicas de cuerpo menos atlético. Esto la alejó de los esfuerzos de marcas como Nike y Under Armour, cuyas campañas a favor del empoderamiento femenino con frecuencia muestran grandes figuras del deporte.
El anuncio dirigido por Kim Gehrig, tiene más de 7 millones de visitas en YouTube desde su lanzamiento el pasado mes de enero y hasta ahora ha generado una reacción muy positiva tanto en las redes sociales como en los medios internacionales, pero ¿acaso es esto todo lo que necesitamos para hablar de equidad?
De acuerdo con información de Adage, la directora de origen australino admitió que este proyecto ha sido la primera experiencia profesional en la que ha admitido su género, ya que su nombre unisex le ha ayudado a abrirse muchas puertas en espacios en los que las personas asumieron que se trataba de un hombre.
«Yo no quiero quedarme encasillada como una directora que sólo hizo anuncios de tampones y maquillaje, a través de This girl can, sentí que la voz femenina era importante», aseguró Gehrig a la publicación.
Este anuncio, pertenece a una de las muchas campañas recientes que poseen una fuerte voz femenina y que han demostrado ser muy populares en las redes sociales, otro destacado ejemplo de ello es «Like a Girl«, una iniciativa lanzada por Always también dirigida por una mujer: Lauren Greenfield, conocida por su trabajo documental en películas como La reina de Versalles y nominada a un premio del Sindicato de Directores de América por sus excepcional trabajo en la campaña, aunque asegura que se sorprendió mucho al encontrarse como la única mujer entre las nominaciones.
La campaña alcanzó 75 millones de visitas en todo el mundo y con el tiempo se convirtió en el anuncio seleccionado por la marca para aparecer en el Super Bowl, demostrando que la voz de las mujeres puede tener un impacto real. «Creo que las marcas están empezando a reconocer que las mujeres realmente pueden conseguir estos grandes números», señaló Greenfield.
Sin embargo, las mujeres aún representan una minoría en el campo laboral, y la dirección audiovisual no es la excepción; de acuerdo con información de AdAge, las razones apuntan a falta de modelos de conducta, sexismo entre los equipos de producción de la vieja escuela y una percepción erronea de que las mujeres sólo son capaces y valiosas trabajando en ciertos tipos de publicidad. «Todavía me encuentro con reuniones en donde la gente se sorprende porque soy una mujer», declaró Gehrig.
Esta percepción se ha extendido a ámbitos como la comedia en dónde el género también parece ser una barrera importante. A pesar de ello, la aparición de figuras como Tina Fey y Amy Poehler han comenzado a derrumbar este tipo de prejuicios.
