La vaquita marina está a punto de extinguirse. La captura incidental de esta marsopa endémica del Golfo de California en México no podría entenderse sin las redes ilegales que persiguen al codiciado pez totoaba: un kilo de su vejiga natatoria puede costar más de 50.000 dólares en Asia. Es por estas razones que un usuario de Twitter ha denunciado la venta de un platillo que contiene totoaba en un restaurante de Polanco. La información ha sido compartida en esta red y replicada por distintos medios nacionales.
Esto llevó a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) a emitir un comunicado para aclarar el caso. “La Ley General de Vida Silvestre permite el aprovechamiento comercial de totoaba reproducida en cautiverio a través de las Unidades de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA)”, se lee en el documento. La dependencia explica que en México hay seis UMA de totoaba que cuentan con el permiso requerido. Una de ellas, Earth Ocean Farms, es citada como la UMA de origen de los pescados que adquiere el restaurante Cuines.
Roberto Gómez, administrador del restaurante, dijo a Verne vía telefónica que ahí se ha servido totoaba desde hace cuatros años aproximadamente. «Nunca habíamos recibido quejas o denuncias al respecto, esta es la primera vez, no entendemos por qué», comenta. Él reiteró que el restaurante hace este platillo de forma completamente legal. «Lo que dice SEMARNAT es suficiente, no hay nada más que agregar».
Van 4 días de mi denuncia en redes sociales a @PROFEPA_Mx y @PGR_mx no pasa nada, siguen ofreciendo Totoaba en Masarik… pic.twitter.com/Nvrbw3BPh6
— Alberto Rojas (@AlbertoRojasrue) 18 de abril de 2017
Según la oficina de gobierno, una de las condicionantes para estas UMA es que destinen aproximadamente la mitad de la población juvenil de totoabas al repoblamiento de la especie en su hábitat natural. “Desde el 2014 a la fecha, estas UMA han liberado más de 200 mil individuos en el Golfo de California. El objetivo es impulsar el aprovechamiento y reproducción sustentable de totoaba para contrarrestar la pesca y tráfico ilegal de la especie”, informa SEMARNAT.
Miguel Rivas, campañista de océanos de Greenpeace México, confirmó a Verne la información. “Las totoabas que crecen en cautiverio se pueden comercializar en territorio nacional”, apunta el también doctor en Ciencias Biológicas. Lo que sería ilegal, añade, es encontrar este platillo en un país distinto a México, ya que este pez no se puede exportar. La totoaba está incluída en el apéndice uno de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres, lo que significa que figura entre las especies más vulnerables.
Fuente: Verne