La Niñez que vive con VIH o SIDA, coexisten factores de vulnerabilidad asociados a la pobreza extrema
Aún cuando se han hecho campañas en contra de la discriminación y el estigma, el caso particular de las personas portadoras de VIH o SIDA es evidente. El estigma y la discriminación asociados al SIDA constituyen en sí mismos una epidemia silenciosa y devastadora; alimentada por la ignorancia, los prejuicios y los mitos que representan los verdaderos obstáculos para las personas que viven con VIH o SIDA, señala Visión Mundial.
El VIH y SIDA en general es considerado como un problema médico. Pero, el SIDA también es un problema social. Desde que se identificó la epidemia en 1981, mucha gente ha usado el SIDA como excusa para discriminar.
En América Latina y el Caribe, el caso particular de la Niñez con VIH/SIDA, coexisten factores de vulnerabilidad asociados a la pobreza extrema, la falta de oportunidades y acceso al bienestar social, que deben de ser recordados en el marco del Día Mundial de la Lucha contra el SIDA este primero de diciembre.
En medio de estas condiciones, la epidemia de VIH y SIDA encuentra además un terreno fértil por la discriminación y el estigma que continúan siendo obstáculos mayores para una respuesta más efectiva. Las leyes que sancionan la discriminación contra niños y niñas afectados por el VIH/SIDA son insuficientes para protegerlos.
“En el pueblo nos tenían miedo”
Testimonio de Rosario (1) una niña de 13 años originaria de Chiapas.
“Una vez viaje en avión, fue cuando estuve más grave, cuando estuve con mi enfermedad y me llevaron a ver a un médico a México, que es la capital de mi país. Yo me sentía muy mal, puro vómito y calentura. Pero ahorita ya no me estoy enfermando. Me gusta viajar en bus, a la doctora vamos en autobús. La doctora sí me trata bien. No conozco a otros chicos de mi pueblo que tengan VIH/SIDA. Y no voy a un lugar donde haya otros chicos como yo, para hablar y hacer grupos y eso. Tomo medicina y pronto iré a México, a consulta. Voy a ir con mi abuelita… con mi mamá.” Las palabras de Rosario, captadas por Visión Mundial, dan cuenta de la falta de atención médica integral en las comunidades indígenas y vulnerables, pues ella se tuvo que trasladar a la Ciudad de México para recibir atención.
“Vivo con mi abuela, ella me cuida mucho, yo le digo mi mamá. Porque mi mamá se murió cuando yo era pequeña. Menos de dos años tenía cuando me empecé a enfermar, y mi mamá no sabía qué tenía. Un doctor en mi pueblo dijo que me llevaran a mi casa porque me iba a morir porque no había remedios. Después, en el pueblo nos despreciaban. Mi mamá que ahora tiene 73 años siempre vendió una bebida típica de Chiapas que se prepara con cacao y maíz y se llama pozole, y pollo descuartizado, y le habían dejado de comprar porque nos tenían miedo.
Yo dejé de ir tres años a la escuela. Porque, la primera vez, mi mamá me inscribió sin decir nada, pero cuando empecé con molestias los maestros se dieron cuenta. Los padres de familia habían sacado a sus hijos de la escuela, a más de 40 niños me dijo mi mamá que sacaron de la escuela. Decían para qué quería yo estudiar, si de todas formas me iba a morir. Otros dijeron que estaban dispuestos a pagar un maestro particular, pero no me querían en la escuela.
Entonces el director me expulsó. Entonces me enfermé muy grave, del ánimo y también de los pulmones, y como en el hospital no tenían los medios para atenderme me tuvieron que llevar a México.” Visión Mundial comprometida con la niñez, sus familias y comunidades en la búsqueda y el logro de una mejor calidad de vida, está llevando a cabo la Iniciativa Esperanza contra el VIH/SIDA.
“Pero después vinieron de allá de México, de los derechos humanos, a inscribirme. Ahora me aceptan, ven que no estoy enferma. Todas las personas que nos trataban mal ahorita ya no. Hubo una señora que decía que no me dieran la medicina, que me dieran algo para que ya me muriera. Pero llegó un doctor a dar pláticas en la escuela y se enojó mucho con esa señora, le dijo que se callara porque dijo que no sabía si ella no tenía otra enfermedad más grave.” Visión Mundial considera que la educación sexual es una herramienta fundamental. Por ello, capacita a los niños, niñas y adolescentes en destrezas y valores para tomar decisiones apropiadas y estimular comportamientos saludables que prevengan el VIH/SIDA.
“Vivo en un pueblito pequeño del estado de Chiapas. Los sábados voy al catecismo y los domingos voy a misa y luego voy a pasear con mi papá, Arturo, él me adoptó. Porque mi papá también se murió. Ya el lunes voy a la escuela. Mi maestra es bien buena. De lo que me enseñan en la escuela lo que más me gusta es hacer dibujos y colorearlos y contar cuentos. Mi cuento favorito es el de Pinocho, porque es chistoso. También me gusta Ricitos de oro, y cuando juego a las escondidas mi escondite es debajo de la mesa. No hay nada que no pueda hacer por tener el VIH/SIDA.”
“Para pintar, me gusta el color rosado, el azul y el morado. En mi casa tengo nada más un gatito. Nunca navegué en Internet. Mi casa es pequeña, viven mis tías con mi primo. Yo sé cocinar un poquito, me gusta cocinar plátano frito. Cuando estoy sola me gusta mirar la tele, caricaturas o novelas. Nunca vi que en la tele se hable del SIDA.”
“Cuando sea grande me gustaría ser enfermera. Porque ahorita estoy trabajando en una farmacia. Ahí estoy trabajando con un señor que lo conozco y lo ayudo pero él me ayudó a mí dándome trabajo, y cuando estoy enferma me ayuda con las medicaciones.”
Aunque existe el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, CONAPRED, órgano de Estado creado por la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación, aprobada el 29 de abril de 2003, y publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 11 de Junio del mismo año, aún continúa en la práctica y el trato hacía las personas portadoras de VIH y SIDA la discriminación y el estigma.
A pesar de un marco legal, las violaciones a los derechos suelen ser cotidianas, en un ambiente de violencia e irrespeto a la vida humana. Muchas personas son despedidas de su trabajo, otras más no son contratadas, y siguen viendo discriminación en el trato a aquellas que buscan trabajo o cuidados de salud.
Para Visión Mundial México, definitivamente la negación y la indiferencia no harán retroceder al VIH/SIDA. No se puede aspirar a la plenitud de vida y al desarrollo transformador en forma sostenible con la amenaza de esta epidemia. Son las intervenciones integrales e integradoras con un enfoque estratégico, amplio, multisectorial, sin exclusiones y participativo, las que tendrán éxito para minimizar su impacto y detener su crecimiento.
En estudios realizados por la organización humanitaria en México y el mundo, ha evidenciado que en muchos casos el estigma ligado al VIH viene anexado a estigmas preexistentes, a estereotipos raciales y étnicos y a la discriminación contra la mujer y las minorías sexuales. Asimismo, el miedo y la ignorancia son factores ligados.
En la mayoría de las personas existe un nivel inadecuado de conocimiento sobre el VIH/ SIDA. Esto, aunado al hecho de identificarlo como una enfermedad letal. Provoca el temor a contraer el virus y como resultado muchas personas rechazan, expulsan o discriminan.
Por ello, Visión Mundial concentra sus esfuerzos en la prevención; atención, mitigación y soporte; y promoción de justicia y defensoría. Actualmente desarrolla un proceso de sensibilización y capacitación de personal, se implementan experiencias piloto y modelos de trabajo, y se fortalece la asociación con organizaciones gubernamentales, no gubernamentales, iglesias, asociaciones de base comunitaria, de cooperación internacional y con grupos de personas viviendo con VIH/SIDA.
En 2009, se estima que 370 000 niños contrajeron el VIH durante el período perinatal y la lactancia materna, frente a las 500 000 en 2001, Informe ONUSIDA 2010. En 2009, se estimaba que había 2,6 millones de personas que se infectaron con el VIH (19%) menos de los 3,1 millones de personas recientemente infectadas en 1999 (21%) menos que los 3,2 millones en 1997, año en que alcanzó su máximo anual de nuevas infecciones Como parte de su misión, Visión Mundial de México pone a su disposición información de las zonas en que tiene presencia, así como contacto directo con el personal que labora en estas regiones con la única petición de mencionar la fuente. Visión Mundial de México es parte de la Confraternidad Internacional de World Vision, organización fundada en 1950 y que actualmente tiene presencia en más de 100 países en tres líneas básicas: Desarrollo transformador; Promoción de la Justicia y; Prevención, emergencia y rehabilitación para responder ante desastres y conflictos en las regiones que así lo requieran, independientemente de la religión, raza, grupo étnico o género. Lo anterior es lo que justifica nuestra presencia en países como Indonesia, Irak, Liberia, Chad entre otros.
Fuente: Visión Mundial de México A. C.
yo creo q la gente discrimina sin saber lo q uno sufre y lo dificil q es llevar una vida normal sabiendo la emfermedad q uno tiene yo tengo 19 años y desde q naci padesco de vih nadie lo sabe nada mas q mi familia y mi ex ya q soy muy sensible y me doleria mucho la actitud de esa gente q cree q uno anda contagiando asi nomas x la vida x suerte yo soy responsable de lo q tengo pero estaria bueno q la sociedad entendiera de esa emfermedad y no discriminen porq uno no elige tenerlo…
yo viv la discriminacion de la mitad de mi familia y es muy doloroso ya q yo no tengo la culpa de tenerlo
ojala lo entiendan y mucha suerte para los q la padecen y no bajen los brazos q si luchan todo va a salir bien y esperen a la cura q pronto va a llegar a la argentina!!!