Se sabe que las 3 C´s que definen los problemas de salud de los metropolitanos, son: cáncer, corazón y carretera.
¿Qué podrían hacer las marcas para disminuir los niveles de estrés? Creemos que podrían hacer tres cosas: mejorar la usabilidad de las tecnologías de la información, promover conductas saludables y notificar, como lo hacen los cigarrillos, que el uso excesivo de la computadora, es nocivo para la salud.
Pero el separarnos un poco de los ordenadores, será difícil. La competencia entre los países dedicados al desarrollo de software, es ruda. Filipinas, China, México y la India, están promoviendo programas educativos para mejorar los dos pilares de la programación, que son el inglés y las matemáticas. Tendremos, en cinco años, cientos de miles de ingenieros rondando los corporativos.
Las empresas, conocedoras de las ventajas que da la tecnología, han multiplicado las responsabilidades de sus ejecutivos, pues se cree que hoy en día se puede hacer más con menos tiempo. Y es verdad. Lo que no sabemos si es verdad, es si la tecnología mejora el servicio humano.
Toda esta raigambre de información, de aparatos y de programas, fatiga. Todo proceso de aprendizaje, cansa, dijo y comprobó Lasswell. La información, pero sobre todo la velocidad con la que se mueve, nos paraliza. La tecnología, a su vez, ha usurpado el lugar de la magia y creemos que con los mejores dispositivos, haremos las cosas mejor.
Pero todo esto, es un espejismo. La información se mueve, sí, pero esencialmente la información sigue siendo la misma. Para comprobarlo, puedes leer cien artículos sobre un mismo tema en internet. Al terminar, te darás cuenta de lo siguiente: en internet, lo que hay son opiniones diversas, pero no un exceso de información nueva. Saber esto, nos tranquiliza.
Los empresarios acceden a muchas fuentes de información para tomar mejores decisiones. Las empresas crean anuncios que nos hacen pensar que vivir aceleradamente está de moda. Las promociones que hacen las marcas nos empujan a consumir. Las instituciones, como dijo Marshall Berman, no alcanzan a solidificarse. La gente ya no puede acostumbrarse, como decía Pete Hamill, a un paisaje, pues el ciclo de vida de los edificios es muy corto.
Respiremos. Inhala, exhala, inhala, exhala… Del producto A hay mil versiones y mil formas de crédito para obtenerlo, pero también hay mil sucursales para comprarlo y mil dispositivos periféricos para que luzca mejor. ¿Qué hacer ante este caos, el cual provoca estrés y depresión en jóvenes y viejos? Hay que buscar lo esencial, lo sólido, lo que se mantiene firme ante la marea de las TIC´s.
Estamos seguros de que las marcas que en el futuro sepan cómo tranquilizar a sus clientes, serán las marcas más exitosas. Saber que una empresa de computadoras te enseña, por ejemplo, a reconocer información valiosa y confiable, sería magnífico.
Hoy, en Roastbrief, queremos que te relajes. El mundo sigue siendo un mundo de átomos, pero de átomos que vibran, claro, con la presencia de los bits.
Fuente: Roastbrief.com.mx
Publicada: 13 de febrero de 2012.