El antiguo entrenador de los Miami Dolphins, Brian Flores —uno de los pocos coaches afrodescendientes profesionales— señaló que la NFL está «plagada de racismo» y «vive en una época del pasado». De esta manera el ex-delfín acusa discriminación en la importante liga.
De acuerdo con Forbes, la demanda de Flores, presentada en un tribunal federal de Nueva York, incluye a la asociación deportiva y a los 32 equipos que la integran.
El ex-delfín acusa discriminación por la falta de diversidad
Flores aseguró que la NFL no ha solucionado la escasez sistemática de entrenadores negros y que la Regla Rooney , una política que exige a los equipos considerar para ciertas vacantes a los candidatos provenientes de minorías, a menudo lleva a las franquicias a programar entrevistas «falsas» y de mala fe en lugar de intentar realmente contratar a un personal diverso.
En particular, el ex-delfín acusa de discriminación a los New York Giants por someterlo a un reclutamiento dudoso para el puesto de head coach, a pesar de que ya habían seleccionado al ex coordinador ofensivo de los Buffalo Bills, Brian Daboll, para el trabajo, lo que Flores calificó de una «fachada discriminatoria diseñada para mostrar un falso cumplimiento de la Regla Rooney«.
Alegó un encuentro similar con los Denver Broncos tres años antes. Flores comentó que los directivos se presentaron a una entrevista de trabajo en 2019 con una hora de retraso y «completamente desaliñados», por lo que le quedó claro que solo fue atendido para cumplir con el reglamento.
También criticó a los Dolphins por despedirlo aun cuando llevó al equipo a dos temporadas ganadoras consecutivas y aseguró que el propietario lo dirigió para asegurar una posición más favorable en el draft.
Los equipos responden
Los tres equipos se defendieron de las imputaciones de Flores en declaraciones a Forbes. Los Giants expresaron que Flores estuvo «en la conversación para ser nuestro entrenador principal hasta el último momento», pero finalmente seleccionaron a Daboll con base en sus números.
Los Broncos calificaron lo declarado por Flores como descaradamente falso, argumentando que su entrevista comenzó a tiempo y que el personal del equipo mostró un «sincero interés» en él.
En tanto, los Dolphins negaron cualquier tipo de discriminación racial y que la «implicación de que actuamos de manera inconsistente con la integridad del juego es incorrecta» . Por su parte, la NFL señaló a las afirmaciones como «sin mérito» en una intervención que defendía los esfuerzos de diversidad de la liga.
Un movimiento inesperado
Flores dice que descubrió que los Giants habían elegido a Daboll para el puesto de entrenador principal días antes de su entrevista porque el entrenador de los New England Patriots, Bill Belichick, le envió accidentalmente un texto de felicitación destinado a Daboll.
De acuerdo con la presentación judicial de Flores, Belichick le envió un mensaje diciendo: «Me enteré por Buffalo y los Giants que eres su hombre», pero cuando le preguntó si se refería a él, Belichick respondió: «Lo he jodido… Creo que están nombrando a Daboll».
La NFL ha luchado durante décadas por aumentar el número de entrenadores principales de color. Solo uno de los 32 equipos de la liga —los Pittsburgh Steelers con Mike Tomlin— está actualmente dirigido por una persona afrodescendiente, después de que Flores y David Culley de los Houston Texans fueran despedidos.
Los candidatos de las minorías también han estado poco representados en los puestos de coordinador ofensivo, que son escalones comunes para los puestos superiores. La liga intentó frenar esta tendencia en 2003 con la introducción de la Regla Rooney, pero algunos observadores dicen que es inadecuada y se aplica mal.
En su demanda, el ex-delfín acusa discriminación y por la escasez de headcoaches con orígenes diversos en la NFL, concluye que la liga está: «racialmente segregada y es administrada como una plantación», con propietarios y ejecutivos blancos que manejan una lista de jugadores predominantemente negros.