De acuerdo con un nuevo estudio de la revista Science, titulado Evaluación de las proyecciones de calentamiento global de ExxonMobil (2023), durante años, de manera confidencial, el gigante petrolero logró predecir el calentamiento global de forma correcta y hábil, pasándolo por alto, para seguir generando ganancias a costa de la responsabilidad ambiental que ello implicaba.
Y es que como lo indica el análisis, algunas compañías de combustibles fósiles, como petróleo y gas, por décadas se negaron a reconocer públicamente el cambio climático, bajo el argumento de que los modelos utilizados para predicción eran demasiado inciertos.
Lo reportado por Science se suma a lo expresado por otros especialistas, que han sugerido que con sus propios modelos internos, consistentes con los de otros esquemas académicos y gubernamentales independientes, la industria petrolera conocía de los riesgos, por lo que pudo ayudar a acelerar la transición a energías limpias y evitar la carrera contra el clima, según un estudio publicado en The Guardian.
Predecir el calentamiento global
Es conocido que el sector de los combustibles fósiles —uno de los grandes responsables de la alteración de la temperatura del planeta— ha perpetrado millonarias campañas de desinformación y cabildeo para confundir al público y a los líderes políticos, y así retrasar el final de la quema y extracción de carbón y petróleo.
Sin embargo, el informe de Science va más allá, pues está dejando en claro que los científicos de Exxon fueron asombrosamente precisos en sus proyecciones desde la década de 1970, prediciendo una curva ascendente de las temperaturas globales y las emisiones de dióxido de carbono que están cerca de igualar lo que realmente ocurrió cuando el mundo se calentó a un ritmo no visto en millones de años.
El análisis revela que los científicos de Exxon llegaron a la conclusión de que habría un calentamiento global de alrededor de 0.2 °C por década debido a las emisiones de gases, derivados del uso de petróleo, carbón y otros combustibles fósiles. De hecho, sus estimaciones eran muy hábiles y consistentes como las gubernamentales.
Para llegar a esta revelación, se tomó la investigación previa de Geoffrey Supran, Evaluación de las comunicaciones sobre el cambio climático de ExxonMobil (2017), que ayudó a arrojar luz sobre lo que sabían Exxon y otras empresas petroleras. «Era impresionante ver que las proyecciones de Exxon se alineaban tan estrechamente con lo que sucedió posteriormente», indicó Supran.
«Ahora tenemos la prueba irrefutable que muestra que predijeron con precisión el calentamiento años antes de que comenzaran a atacar la ciencia. Estos gráficos confirman la complicidad de lo que sabía Exxon y cómo engañó».
Geoffrey Supran, investigador.
Las mentiras de Exxon se destapan
La indagación que muestra que Exxon logró predecir el calentamiento global, analizó más de 100 documentos internos y publicaciones científicas revisadas por pares, ya sea producidos internamente por científicos y gerentes de Exxon, o coescritos por científicos de Exxon en publicaciones independientes entre 1977 y 2014.
Y se detalla que Exxon rechazó la idea de que el mundo se dirigía a una edad de hielo inminente, —que era una posibilidad discutida en la década de 1970— prediciendo en cambio que el planeta se enfrentaba a un «super-interglaciar inducido por dióxido de carbono».
Aunado a ello, también descubrió que el calentamiento global estaba influenciado por la humanidad y que se detectaría alrededor del año 2000, y anunció el «presupuesto de carbono», que se refiere a un límite de emisiones permitidas para mantener el calentamiento por debajo de 2 °C por encima de los niveles preindustriales.
En 2013, Rex Tillerson, entonces director ejecutivo de la compañía petrolera, aseguró que los modelos climáticos “no eran competentes” y que “existían incertidumbres” sobre el impacto de la quema de combustibles fósiles.
«Lo que hicieron fue esencialmente permanecer en silencio mientras hacían este trabajo y solo cuando se volvió estratégicamente necesario para manejar la amenaza existencial para su negocio, se levantaron y hablaron en contra de la ciencia».
Geoffrey Supran, investigador.
Implicaciones en torno al silencio climático
Si bien, otros estudios han señalado el silencio e irresponsabilidad de las petroleras, la nueva investigación agrega un capítulo nuevo sobre lo desafortunado de esta situación, que pudo acelerar los esfuerzos contra la crisis climática.
Por ello, Natalie Mahowald, especialista en clima de la Universidad de Cornell, afirma que los retrasos en la acción —sin advertencia previa y la campaña de mentiras de de Exxon— tienen «implicaciones profundas» porque las inversiones previas en energía eólica y solar podrían haber evitado los desastres climáticos actuales y futuros.
En tanto, Drew Shindell, científico del clima de la Universidad de Duke, indica que el nuevo estudio era un «análisis sólido y detallado» y que los comentarios públicos engañosos de Exxon sobre la crisis climática eran «especialmente descarados» dada la participación de sus científicos en el trabajo con investigadores externos para evaluar el impacto global.
Por su parte, Robert Brulle, un experto en políticas ambientales de la Universidad de Brown, que ha investigado la desinformación climática difundida por la industria de los combustibles fósiles señala que «los esfuerzos en curso para responsabilizar a Exxon tomarán nota de este estudio», en referencia a las diversas demandas que se han hecho para que las petroleras asuman su responsabilidad social y ambiental y paguen por los daños.
En este sentido, parece ser que Exxon nunca ha mantenido una postura en favor del medio ambiente, pues siguió con el mismo proceder aún cuando tuvo conocimiento de lo mucho que le costaría al planeta, solo observando cómo la crisis avanzaba.