En 18 meses la empresa tendrá listos dos prototipos para actividades de preventa y supervisión; el proyecto cuenta con el apoyo del Gobierno mexicano y del Tecnológico de Monterrey.
Junto con la producción de refrescos, la operación de las tiendas de conveniencia Oxxo, la manufactura de refrigeradores ahorradores con Imbera y su incursión en el negocio de las farmacias, FEMSA desarrolla también prototipos de vehículos eléctricos, que le significará una inversión de dos millones de dólares.
El director de Asistencia Técnica y Abastecimiento de FEMSA Logística, Alex Theissen, explicó que la empresa desarrolla dos vehículos eléctricos: uno que servirá para llevar a cabo las actividades de preventa y supervisión en tiendas y un camión con capacidad de carga de dos toneladas.
La intención que la cadena minorista y embotelladora es que los prototipos de los vehículos eléctricos estén listos en los siguientes 18 meses.
El proyecto del camión de carga eléctrico se está desarrollando con fondos del Conacyt, el Tecnológico de Monterrey y la compañía española Quimera, experta en desarrollo de vehículos eléctricos.
“Parte del fondo (para el camión eléctrico) proviene del Conacyt y se gastará en Europa y otra parte en México donde estamos buscando componentes mexicanos e ingeniería mexicana porque la idea es que fabrique ese auto en el país”, agregó Theissen.
La empresa está tratando de reducir el consumo de combustible de su flotilla a través de energía alternativa y nuevas tecnologías. El año pasado, FEMSA disminuyó 7% el consumo de combustible por kilómetro recorrido de toda su flotilla y este año pretende reducirlo otro 3%.
Para lograr la reducción del consumo de combustible implementó varias medidas como disminuir el número de vehículos que no van con carga completa o que regresan vacíos; introdujo un sistema de auto inflado para mantener la presión correcta en las llantas; mejoró las técnicas de manejo de sus choferes; y modificó la programación de sus viajes.
“El ahorro en pesos no necesariamente es un 7%, es un ahorro en proporción a los kilómetros que te moviste. La flota se utiliza para prevender, supervisar, mover producto o mover insumos y el costo de mover los productos es muy importante en el precio final de los productos y el combustible es uno de los principales componentes de ese costo”, explicó Theissen.
La compañía también puso en marcha el Programa Movilidad Sostenible donde participan Heineken, Coca Cola-FEMSA y Oxxo, donde el objetivo es encontrar alternativas para las necesidades de movilidad de la empresa en el futuro.
En los próximos cinco años, FEMSA va a cambiar 1,000 autos de gasolina a gas LP y para la categoría de camiones de reparto de dos toneladas se está pensando pasar del diesel al gas LP o gas natural, además de los vehículos eléctricos.
En cambio, para los tractocamiones la alternativa es pasar del diesel al gas natural.
“Apenas estamos definiendo con las tecnologías actuales cuántos vehículos podemos cambiar y que sea económicamente factible, necesitamos encontrar al proveedor adecuado para cambiar los motores de gasolina a gas LP”, agregó Theissen.
Los vehículos contarán con características propias para una flotilla, como son durabilidad, además de estar diseñados para que una persona pueda hacer supervisiones de tienda en tienda o incluso para transportar artículos de preventa de FEMSA.
“Aunque ya existen autos eléctricos en el mercado de Nissan, General Motors y algunos otros que ya comercializan vehículos eléctricos o híbridos, la realidad es que están enfocados a un mercado distinto a una flotilla”, explicó Theissen.
FEMSA cuenta con una flota de 38,000 vehículos entre automóviles, motocicletas y tractocamiones, los cuales recorren más de 250 millones de kilómetros al año.
El proyecto del auto eléctrico se desarrolla junto con una compañía y una universidad alemanas, de las que no quiso compartir el nombre, además de contar con la participación del Tecnológico de Monterrey.
Fuente: CNN Expansión
