El encarecimiento de los fertilizantes químicos y las frecuentes sequías que afectan al Bajío han obligado a gobiernos y empresas de la región a desarrollar tecnologías que aseguren de alguna manera el logro de los cultivos, y permitan un mejor aprovechamiento de los suelos y los recursos hídricos.
Una de esas tecnologías es la lombricultura, proceso mediante el cual se genera un fertilizante orgánico con el auxilio de la lombriz y en el que Guanajuato es puntero en el país, al contar con más de un centenar de microempresarios en este ramo.
Grupo Dalet, por medio de su marca Nutriland, es una de las insignias guanajuatenses en este negocio. Creada en 2007 en Apaseo el Alto y con ventas en estados vecinos, principalmente Jalisco, Durango y Michoacán, ahora afina sus planes de exportar a Estados Unidos y China.
Rodrigo Flores, gerente general de ventas de Nutriland, dijo que en Guanajuato, aun con los apoyos gubernamentales, todavía «es complicado colocar este tipo de fertilizantes y concientizar a un campesino que lleva 30 o 40 años cultivando sus tierras, mientras que en otros mercados se busca la calidad de la tierra mexicana».
Pese a este obstáculo, los ánimos de Grupo Dalet y otros pequeños empresarios del giro en Guanajuato no han decaído; por el contrario, esta compañía, originada por Daniel Pérez, ha crecido en producción y en nuevos clientes.
Así, en las aproximadamente 53 hectáreas de terreno que mantiene en Apaseo el Alto produce este abono, que ahora venderá Home Depot y Walmart para consumidores del hogar.
Ser un empresario de los fertilizantes orgánicos no es sencillo y con base en la lombricultura es todavía más complicado, aseveró Rodrigo Flores. Indicó que para obtener un kilogramo de este abono deben transcurrir al menos seis meses.
Por eso Grupo Dalet se encuentra en la etapa de alcanzar su punto de equilibrio, pues «aunque nacimos en 2007, fue hasta mediados de 2008 y luego en 2009 cuando recién comenzamos a ver los primeros ingresos», dijo el entrevistado en el marco de la feria de tecnologías verdes «Expo en Verde Ser 2011».
«¿Cómo se hace un fertilizante orgánico teniendo como base la lombricultura? Se debe preparar un terreno con ciertas dotaciones de agua, luz solar, viento y luego preparar una composta y que ésta entre en su proceso de putrefacción con ayuda de la lombriz roja californiana.
«Luego se hacen otros procedimientos, que son nuestra tecnología patentada, pero básicamente se necesitan los residuos orgánicos, la lombriz y cuidar el clima», comentó.
El directivo sostuvo que en México más de 70 por ciento de los fertilizantes son importados y en su mayoría también son químicos, fabricados principalmente a base de sustancias derivadas del petróleo, de ahí el alza continua en sus precios.
Grupo Dalet confía en que en no más de cinco años el abono orgánico ganará terreno, frente al 2 por ciento que representa en la actualidad en el sector.
«Aunque hay muchos tipos de fertilizantes orgánicos y también de lombricultura, el negocio todavía es virgen en México. Tanto en productores como en ventas sí hay apoyos, pero los empresarios todavía son muy pequeños, algunos producen 80 toneladas al año y los clientes piden miles.»
Fuente: El Financiero, Negocios, p. 29.
Por: Nicolás Lucas.
Publicada: 7 de noviembre de 2011.
VIVO EN UNA COMUNIDAD AGRICOLA. ATLIXCO, ME INTERESA CONOCER SUS PRODUCTOS Y SABER SI HAY POSIBILIDAD DE VENDERLOS EN MI COMUNIDAD
Estamos ubicados en Tehuacán, Pue., y la capacidad instalada actualmente es para la producción de 5,000 tn por año de composta orgánica.
La matería prima es principalmente de cerdaza y gallinaza, los productos están certificados como orgánicos.
Estos productos se han aplicado en diversos cultivos como:hortalizas, maíz, chiles, frutales, áreas verdes, etc. Con excelentes resultados.