El Consejo Nacional Empresarial sobre SIDA (CONAES) reconoce la importancia y necesidad de enfrentar desde la iniciativa privada dos de los más grandes impedimentos para la prevención y tratamiento del VIH-SIDA: la estigmatización y la discriminación.
«La gente que vive con este padecimiento tiene menos probabilidades de buscar un tratamiento médico eficaz por temor a revelar su estado ante las áreas de Recursos Humanos o proveedores de prestaciones laborales.
«Las empresas que no discriminan realmente son más competitivas en un mundo globalizado.
Asimismo, dan otro enfoque a la cultura de la responsabilidad social de la que tanto se habla hoy en día, con acciones concretas y empezando en casa», señala Jesús Arenas Wiedfeldt.
(Redacción), Reforma, Empresas, p. 2