La demanda por acciones verdes no parece tomar pausa durante los días iniciales de este 2021 como lo refleja el avance de los fondos de inversión cotizados en bolsa – también conocidos como ETFs por sus siglas en inglés – los cuales siguen generando rendimientos atractivos desde inicios de año tras concluir un 2020 histórico.
En lo que va de año, el fondo WilderHill Clean Energy (PBW) de la compañía Invesco lidera el avance tras producir un 25.9% en menos de un mes, seguido por el fondo CleanTech (CTEC) de la empresa Global X, el cual se ha apreciado de igual forma un 25.4% desde inicios de año.
Curiosamente, estos dos fondos líderes han optado por mantener a raya su exposición a las populares acciones de empresas fabricantes de vehículos eléctricos como Tesla (TSLA) y Nio (NIO) aún cuando el apetito de los inversionistas por comprar acciones de Tesla no parece estar disipándose para nada.
En este sentido, parece que otras compañías resultan más atractivas para los gestores de fondos a cargo, con empresas como Plug Power (PLUG), Enphase Energy (ENPH), y Sunrun (RUN) compartiendo recientemente el plató dada la creciente adopción de las energías limpias por parte de empresas y gobiernos a escala global.
Dado este creciente apetito de Wall Street por compañías pro-ambiente, el siguiente artículo busca dar una mirada más de cerca de las complejidades relacionadas a invertir en ETFs, o incluso en fondos mutuales, como vehículos para obtener exposición a esta interesante tendencia.
No todos los fondos cotizados en bolsa son iguales
Aún cuando la mayor parte de los ETFs que cubren el segmento de energías limpias han estado generando rendimientos positivos recientemente, un viejo adagio conocido en Wall Street explica esta situación de forma sencilla: “una marea creciente levanta todos los barcos”.
Lo que esto significa es que el momentum positive que el sector ha estado viviendo ha contribuido a levantar el valor de las acciones de la mayoría de las compañías que pertenecen al mismo, aún cuando la calidad de cada una puede variar de forma significativa.
Por esta razón, una mirada más de cerca a las acciones en las que invierte cada fondo puede ilustrar de mejor forma que instrumentos están influenciando sus recientes subidas, lo cual, basándose en el potencial de estas componentes, puede llevar a concluir si realmente existen méritos para justificar las valoraciones actuales.
Invesco WilderHill Clean Energy ETF (PBW) vs. Global X’s CleanTech ETF (CTEC)
Un ejemplo de esta situación se evidencia al analizar la composición de los ETFs líderes en el segmento de energía limpia este año: los fondos PBW de Invesco y CTEC de Global X.
Un primer vistazo revela que PBW está mucho más diversificado que CTEC, ya que sus principales 10 inversiones solo representan un 26% de sus activos en administración, mientras que las 10 principales inversiones de CTEC representan un 55% de su portafolio total.
Invesco WilderHill Clean Energy ETF (PBW) – Análisis de concentración – Fuente: ETFDB.com
Esto significa que el desempeño de PBW es menos sensible a las fluctuaciones de las acciones individuales que componen el fondo, mientras que para CTEC, una fuerte fluctuación en valores como Plug Power y Enphase podrían resultar en fluctuaciones fuertes en el valor del fondo.
Un ejemplo hipotético de una caída de 10% en ambos valores en un mismo día resulta en un desliz de un 1.8% en CTEC y esta volatilidad es más que posible para instrumentos de la naturaleza de los dos previamente mencionados.
Por otro lado, una caída de esta misma escala tendría un impacto limitado para el fondo PBW de Invesco, ya que estas acciones solo representan un porcentaje menor de los activos del fondo mientras que otras acciones podrían desempeñarse de forma mucho menos negativa – o incluso positiva – durante la misma sesión.
Adicionalmente, otros elementos pueden ser también analizados para determinar cual de estos ETFs resulta una mejor elección para un inversionista en particular, incluyendo su exposición geográfica y por sector económico.
En lo que se refiere a la geografía, algunos inversionistas se inclinan por las acciones de empresas basadas en Estados Unidos debido a la solidez de los entes regulatorios de dicho país, mientras que otros se decantan por fondos que tienen mayor exposición a sectores económicos como el industrial o tecnología.
Sea que te identifiques con una u otra de estas posiciones, el hecho de invertir en un fondo que se enfoque en las energías limpias no siempre resulta en una apuesta lineal por el sector.
En este sentido, es importante comprender que los gestores tienen la libertad de incorporar los instrumentos que crean convenientes basados en sus análisis, lo cual podría desviar de forma dramática – positiva o negativamente – los rendimientos del fondo en comparación a los del mercado en general.
