Uno de los mayores agentes contaminantes en nuestro país, es la basura plástica que los habitantes del planeta generamos día con día ya que estos desechos se van directamente a los ríos, mares, playas y sitios en donde afectan a la flora y fauna del ecosistema.
Se trata de un problema ambiental muy grave, puesto que el plástico no es biodegradable y es una gran amenaza para la vida silvestre, en particular en los océanos.
El plástico no es biodegradable y es una gran amenaza para la vida silvestre, en particular en los océanos.
La basura plástica está creciendo a un ritmo constante y alarmante, según el último estudio elaborado por el Foro Económico mundial. Asimismo, esto es un problema de gran dimensión, puesto que la producción de plástico utiliza millones de barriles de petróleo año tras año.
Ante esa situación, Francia ha tomado la decisión de prohibir todo tipo de utensilios de plásticos para uso en alimentación, y seguirá permitiendo la venta de productos compostables y de origen biológico. Esta nueva decisión estará en vigor en 2020.
Se trata de una ley que continúa con la prohibición de las bolsas de plástico en las tiendas de comestibles y además. ambas son parte de la Ley de Crecimiento Verde.
Francia prohíbe vasos y platos de plástico en su país
Francia quiere promocionar la reducción de residuos al fomentar el reciclaje, ya que en ese país, se calcula que en Francia de los casi 5 millones de vasos y platos de plástico que se tiran a la basura, sólo el 1% se recicla.
Esta cifra quiere decir que son desechados 150 vasos de plástico por segundo. Con ellos se podría construir una pirámide de siete kilómetros de largo y ocho de ancho, el equivalente a 25 torres Eiffel.
Por ello, el objetivo de Francia, según el presidente François Hollande, es hacer de Francia una nación ejemplar en términos de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, la diversificación del modelo energético y el aumento del despliegue de las energías renovables.
Los componentes de los plásticos tienen una base de mezcla de polipropileno o de poliestireno, materiales que sean complicados de reciclar. De acuerdo con la Asociación de Salud Medioambiental de Francia, 1.6 mil millones de los plásticos son incinerados y 2.4 mil millones se entierran en vertederos donde tardarán 500 años en degradarse.
De acuerdo con la actual ministra de Ecología, Sostenibilidad, Desarrollo y Energía, Ségolène Royal, el plan de crecimiento verde aprobado bajo su mandato, pretende reducir el vertido de residuos a la mitad para 2025 y reducir los gases de efecto invernadero un 40% para 2030, lo que supondría volver a los niveles de 1990.
Reducir el consumo de plástico no es únicamente tarea de un solo país, esto es chamba de todos., ya que cientos de estudios científicos han demostrado que para el año 2050 habrá más plásticos que peces en nuestros océanos. De acuerdo con el World Economic Forum, se desechan el 95% de los plásticos que usamos durante un periodo corto de tiempo, un hecho que afecta al medio ambiente y además hace que no se aprovecha una oportunidad de mercado de 80 mil a 120 mil millones de dólares y cada año, 8 millones de toneladas de esos plásticos acaban en el mar.
Por si fuera poco, se prevé que el consumo de plásticos se duplique durante los próximos veinte años, es por ello que tenemos que cuidar al medioambiente al disminuirlos o erradicarlos.