Debido al cambio climático y al aumento de la contaminación en todo el mundo, diferentes gobiernos están optando por medidas que reduzcan los niveles de producción de CO2.
El ejemplo más claro y actual es el nuevo objetivo del gobierno de Francia, que es prohibir la venta de automóviles de gasolina y de gasóleo en Francia para 2040, de acuerdo con Nicolas Hulot, ministro francés de Ecología.
“Anunciamos el final de la venta de coches de gasolina y diésel de ahora a 2040” declaró Hulot, una personalidad conocida y apreciada en el mundo de la ecología en Francia. Para Hulot, este acto es una verdadera revolución.
El ministro francés reconoció que el objetivo de terminar con la venta en Francia de los vehículos que funciones con derivados de combustibles fósiles en los próximos 23 años, será pesado, sobre todo para las empresas fabricantes de automóviles.
«Nuestros propios constructores (de automóviles) tienen cómo alimentar y encarnar esta promesa (…) que es además una cuestión de salud pública».
Pegout, Citroen y Renault, son las empresas francesas que encabezaron en 2016 una lista sobre los constructores que generan menos emisiones contaminantes, según la Agencia Europea de Medioambiente.
“ Se darán ayudas financieras gubernamentales para que las familias modestas puedan adquirir vehículos limpios, pocos contaminantes en los próximos meses”.
También acelerará el desarrollo de ayudas para la compra de autos menos contaminantes, además de que esta medida será impulsada para sustituir a los autos diésel en las carreteras en favor de híbridos y eléctricos.
Tan solo en 2016, los autos híbridos y eléctricos fueron la compra de 3.6% de los autos nuevos en Europa Occidental.