Con reconocimiento al liderazgo
de Eduardo Touché y Adrián Aguirre Reyna
Por: Emilio Guerra Díaz
La actual crisis que viven las comunidades rarámuris en la sierra tarahumara está siendo atendida por varios actores, pero de entre los que brindan apoyo permanente en la región se puede señalar tanto a la Fundación Tarahumara José A. Llaguno y a la propia Fundación del Empresariado Chihuahuense (FECHAC). Esta última ha realizado a lo largo de sus años de trabajo, inversiones importantes y de gran relevancia con su presupuesto y con la afluencia de recursos adicionales de empresas que se han asociado a la atención de estos pueblos indígenas.
FECHAC hoy responde a la emergencia rarámuri con la campaña Nakúropo, “alimentando la esperanza” donde se han sumando Gruma, El Heraldo de Chihuahua, Fundación Wal-Mart, Televisa Chihuahua, Al súper, Fomento Social Banamex, Cruz Roja Mexicana, Canal 13, las estaciones de radio El Lobo, BM Radio y La Pantera; Almacenes Fama e incluso la International Community Foundation.
Ambas fundaciones han trabajado en el estado de Chihuahua respetando la autodeterminación de esas comunidades y sobre todo velando por su cosmovisión, extremadamente vinculada a la naturaleza y mostrando al país, la valía de estos compatriotas por su aportación cultural e idiosincrática. Para estas instituciones además de un orgullo, los rarámuris son un protagonistas de un patrimonio cultural único en el mundo.
Hace poco más de 10 años pude constatar varios de sus programas en una gira de trabajo por la sierra tarahumara que nos significó a los participantes uno de los viajes en los que recorrimos más kilómetros por terracería que nunca. Prácticamente en esas jornadas “vivimos” en el automóvil para trasladarnos de un lugar a otro. Visitamos dispensarios, hospitales, escuelas y albergues financiados por FECHAC y sus socios.
Desde su creación, esta fundación sui generis, capta recursos por un autoimpuesto que los empresarios concertaron otorgar, a raíz de una inundación que sufrió la capital del estado en 1990, para atender la emergencia por invitación de Don Samuel Kalisch. Los recursos económicos captados por el autoimpuesto ingresan a un fideicomiso. En el fideicomiso están representados, tanto gobierno como empresarios, y sus decisiones sobre el destino de las donaciones se toman por acuerdo y se asigna a la propia FECHAC, como el operador y garante de dar seguimiento a la correcta aplicación de cada inversión. El profesional equipo de FECHAC se encarga de velar por la viabilidad de los proyectos, del cuidado de la inversión y de su manejo transparente y sobre todo de medir el impacto social generado por sus acciones.
Para que el lector comprenda la gran importancia de esta fundación, es necesario señalar que en los últimos años ha invertido para el estado más de 120 millones de pesos cada año, colocándose como una de las instituciones privadas que invierte un volumen considerable de recursos, incluso más de los que algunas entidades públicas realizan como el programa de co-inversión de la Secretaría de Desarrollo Social en el estado.
FECHAC ha realizado una estrategia de trabajo en red para cubrir todo el estado (el de mayor extensión territorial) teniendo consejos locales como Juárez, Ojinaga, Cuauhtémoc, Delicias, Camargo, por citar algunos. En cada uno de esos órganos participan empresarios de reconocida trayectoria y miembros de organizaciones filantrópicas locales para atender problemáticas locales, lo que provoca la afluencia de más empresas y particulares que invierten más recursos.
La labor pública de la FECHAC se ha traducido creación de infraestructura y servicios para atender diversas problemáticas con el talento de ciudadanos organizados en asociaciones civiles no lucrativas en muy diversos campos como: alimentación, alfabetización, salud, arte y cultura, construcción de capacidades, proyectos de generación de ingresos, etc. Lo anterior se traduce en que el gobierno estatal y los municipales de Chihuahua, cuentan con un aliado cuyo aporte enriquece la atención a necesidades sociales que a ellos les toca atender por mandato.
Por otra parte, la fundación invierte recursos en fortalecer y profesionalizar el trabajo de las instituciones filantrópicas porque las considera sus socios y creó los Centros de Fortalecimiento de Sociedad Civil, modelo que se ha empezado a replicar en varios estados del país. En junio del año pasado, el CFOSC de Ciudad Juárez, encabezado por el Dr. Enrique Suárez y Julio Domínguez, realizó el estudio “El Aporte de las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSCS). La Dimensión del Sector Filantrópico de Ciudad Juárez”, que vale la pena consultar porque muestra la valía del trabajo de la ciudadanía organizada.
FECHAC se ha convertido también en un importante aliado para promover la responsabilidad social empresarial en el estado e impulsar el Distintivo Empresa Socialmente Responsable que otorgan Aliarse y el Centro Mexicano para la Filantropía. Como institución se ha convertido en un modelo para la inversión empresarial en la comunidad que ha sido replicado por la Fundación del Empresariado en México y tiempo atrás, por la Fundación del Empresariado Sonorense.
El mismo reto que propone FECHAC que asuman las organizaciones civiles chihuahuenses para su profesionalización, la Fundación también lo enfrenta y con gran éxito. Ha recibido diversos reconocimientos, por cierto los más importantes en México, por su trayectoria entre los cuales se puede citar Premio Eugenio Garza Sada, Reconocimiento al Compromiso por los demás del Cemefi y ser uno de los mejores lugares para trabajar (Best Place to Work), entre otros.
Por lo que hemos expuesto, FECHAC es uno de los socios más confiables en filantrópica que el país pueda tener y quien esté interesado en apoyar a nuestros compatriotas que hoy sufren por la sequía y el frío, pueden donar recursos económicos, su página electrónica es: www.fechac.org
Emilio Guerra Díaz
Emilio Guerra cuenta con amplia experiencia en la Gestión de la RSC, destacando su trabajo en el área de vinculación con la comunidad que potenciar la inversión social empresarial. Ha gerenciado fundaciones empresariales.
