Estamos a un día del Mundial Rusia 2018. Éste pretende ser uno de los mejores eventos a nivel futbolístico y además quiere destacar al ser el mundial con menos discriminación y más igualdad y cumplir con la meta de eliminar el racismo en los estadios.
Sin embargo, también se está preparando la siguiente sede para el mundial del 2022: Catar.
Pero no todo es miel sobre hojuelas. Recientemente, se dio a conocer un informe de la Fundación argentina para la Democracia Internacional denunció las condiciones laborales y humanas «reprochables» en que trabajan los obreros extranjeros de las infraestructuras del Mundial de Futbol de Catar 2022.
Por ello, el presidente de la Fundación, Guillermo Whpei, presentó en Madrid el informe: «La trama de explotación y corrupción del Mundial de Fútbol Catar 2022″ y responsabilizó de la situación a las autoridades cataríes, las empresas y la FIFA.
Se denunciaron las condiciones laborales e inhumanas en que trabajan obreros extranjeros de las infraestructuras del Mundial de Futbol de Catar 2022.
«Van jugar en estadios bañados de sangre, nuestra idea es hablar con futbolistas y federaciones de fútbol para contárselo».
Dicho documento se basa en investigaciones de Amnistía Internacional (AI), la Confederación Sindical Internacional (CSI), Human Right Watch y la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Cabe mencionar que Whpei arremetió contra la Organización Internacional del Trabajo (OIT) porque, según aseguró, ésta organización «dio todo por bueno, todo está perfecto» en Catar.
Datos de Amnistía Internacional, en esas obras han muerto hasta la fecha unas dos mil personas, principalmente nepalíes, además Whpei, dijo que hay 40 millones de «esclavos» en el mundo, que producen directa o indirectamente gran parte de lo que consumimos.
«La designación de Catar 2022 fue «viciada» y hay miles de personas que sufren «esclavitud», sobre todo extranjeros».
El país tiene unos dos millones de trabajadores inmigrantes, que son alrededor del 95% de la fuerza laboral total. El 40% está empleado en la construcción.
Se informó también que para la construcción, las jornadas son de 16 y 18 horas sin descanso semanal, retraso de salarios, trabajo con altas temperaturas, en condiciones insalubres y alojamientos hacinados.
Por ello, Amnistía Internacional denunció a Catar como el principal responsable de las violaciones de derechos y también a las empresas por incumplirlos.
Además, la Fundación para la Democracia Internacional dice que las empresas son responsables de los derechos de sus empleados y de los de los trabajadores que prestan servicios en subcontratas.
La FIFA ha dicho que desde el 2017 se toma muy en serio las condiciones laborales y los derechos humanos».
De acuerdo con Rigoberta Menchú, la impunidad camina junto con la corrupción, y ambas son parte de las más profundas violaciones de los derechos humanos, especialmente los laborales y de los migrantes de Catar.
Catar está ocupado en la construcción de ocho estadios para recibir el Mundial que se jugará por primera vez en su historia del Oriente Medio, serán entre 12 y 14 estadios los que serán necesarios para que el torneo se realice con la participación de 48 países.