La Reunión Preparatoria del G20 tuvo lugar el pasado 20 de agosto en Río de Janeiro, donde se discutieron algunos temas de gobernanza inclusiva encaminados a dar voz y destinar recursos a las comunidades marginadas alrededor del mundo.
Brasil asumió la presidencia de este importante bloque en 2023 y desde entonces eligió poner en el centro de sus esfuerzos la lucha contra las desigualdades bajo el lema “Construyendo un mundo justo y un planeta sostenible”. De esta forma se comprometió a dirigir sus esfuerzos hacia tres ejes principales: la transición energética, el desarrollo justo y sostenible con enfoque en la lucha contra el hambre, la pobreza, y la reforma de las instituciones multilaterales.
A poco tiempo de ceder la batuta del Grupo, Brasil busca asegurar sus últimos pasos y llevar a la conclusión su lucha en materia de desigualdades mediante un debate en torno a la verdadera inclusión y cómo lograrla. Te decimos lo que se habló en esta reunión. ¡No te lo pierdas!
¡Brasil apela a la gobernanza inclusiva!
En la Reunión Preparatoria para la Cumbre Social del G20, llevada a cabo el 20 de agosto de 2024 en Río de Janeiro, representantes de la sociedad civil, así como de los gobiernos y miembros de la academia discutieron las propuestas de la presidencia y los demás miembros del grupo sobre cómo lograr visibilizar y atender las necesidades de los millones de personas que viven en situaciones de vulnerabilidad y pobreza.
Durante el debate se tocaron temas como la participación social, la justicia económica, la soberanía nacional y la inclusión de voces marginadas en los procesos de toma de decisiones internacionales. Además, se pusieron a votación las ideas y propuestas que se subirán a la plataforma Brasil Participativo, una página creada para que ciudadanos de todo el mundo, miembros de organizaciones de la sociedad civil o de diversos movimientos sociales puedan ser parte de la creación de políticas públicas y otras actividades de interés común.
Felipe Hees, representante del Ministerio de Asuntos Exteriores, habló sobre la falta de eficacia y vigencia de las estructuras de gobernanza, principalmente dentro de las Naciones Unidas e hizo hincapié en la tarea del G20 como potencial impulsor político para promover cambios y acciones concretas al interior de la ONU:
“Los acuerdos internacionales existentes carecen de legitimidad y eficacia en su aplicación, lo que compromete su funcionamiento y la confianza global depositada en ellos”.
Felipe Hees, representante del Ministerio de Asuntos Exteriores
Por su parte, Tatiana Berringer, coordinadora social del G20 en el G20 Finance Trail, destacó la incompatibilidad estructural entre instituciones financieras globales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial con las metas que el Grupo desea alcanzar en materia de combate a las desigualdades:
“Es fundamental repensar las cuotas y la representatividad del Sur Global en estas instituciones. La baja participación de las mujeres y de los países en desarrollo en los procesos de toma de decisiones refuerza las desigualdades históricas”.
Tatiana Berringer, coordinadora social del G20 en el G20 Finance Trail
Asimismo, Berringer sugirió la creación de un plan para reformar los bancos y hacerlos funcionar de una manera acorde a las metas globales de igualdad, así como buscar mayor captación de fondos y tributación internacional y apoyo a los fondos verdes. Al respecto, Nathalie Beghin, del Instituto de Estudios Socioeconómicos (Inesc) agregó que la ineficiencia estructural en las medidas de recaudación genera pérdidas millonarias, por lo que es necesaria y urgente una reforma fiscal:
“Los recursos existen, pero están mal distribuidos. Se estima que miles de millones de dólares no se recaudan anualmente debido a fallas en el sistema tributario global”
Nathalie Beghin, del Instituto de Estudios Socioeconómicos
Además, Beghin, mostró su apoyo a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) para estar al frente de las negociaciones de esa reforma con la ONU, para lograr que estos cambios contemplen y beneficien al Sur Global y reflejen una verdadera gobernanza inclusiva.
Lucha por la representatividad de las comunidades marginadas
Por fortuna, el evento puso énfasis en una realidad: el combate a la pobreza y las desigualdades debe ir más allá de los discursos, pues se debe reflejar en financiamiento, cambios estructurales y políticas. En este sentido, Renê Silva, representante de la Voz de las Comunidades (Voz das Comunidades) y de Favelas 20 (F20) puso sobre la mesa la importancia de escuchar de los propios grupos afectados las necesidades que los aquejan para hacer reformas capaces de garantizar la gobernanza inclusiva:
«Más de mil millones de personas viven en favelas en todo el mundo. Es fundamental que estas voces sean escuchadas para reducir las desigualdades y promover el desarrollo sostenible».
Renê Silva, representante de la Voz de las Comunidades y de Favelas 20
Silva instó a implementar nuevos mecanismos para que estos grupos vulnerables puedan expresar las problemáticas a las que se enfrentan, tales como reuniones presenciales en las que sus testimonios sean utilizados para generar políticas gubernamentales que aporten soluciones.
Preto Zezé, del Centro Unificado de las Favelas (CUFA), hizo notar la desconexión entre quienes trabajan por generar políticas gubernamentales y sus agendas políticas y el grueso de la población, además de afirmar que la representación de los grupos marginados sólo es efectiva cuando se refleja en recursos presupuestarios:
“Más de mil millones de personas viven en favelas en todo el mundo. Es fundamental que estas voces se escuchen para reducir las desigualdades y promover el desarrollo sostenible”.
Preto Zezé, del Centro Unificado de las Favelas
Zezé dijo que garantizar la seguridad jurídica es esencial para que las políticas públicas protejan a los más vulnerables sin importar los cambios de gestión gubernamental.
Marcel Fukuyama, del Consejo de Desarrollo Económico y Social (CDES), invitó a colaborar en el desarrollo de un nuevo paradigma económico cuyo enfoque sea la sostenibilidad y la responsabilidad social:
“Brasil puede ser un gran protagonista en la promoción de un nuevo orden de gobernanza económica que priorice la justicia social y ambiental”.
Marcel Fukuyama, del Consejo de Desarrollo Económico y Social
Hacia el cambio de presidencia del G20
La Reunión Preparatoria del G20 celebrada en Río de Janeiro subraya el compromiso de Brasil con una gobernanza inclusiva y sostenible, evidenciado en la discusión de temas cruciales como la justicia económica, la reforma de las instituciones multilaterales y la representación de las comunidades marginadas. Los debates y propuestas planteados reflejan un llamado a una transformación estructural que vaya más allá de los discursos, enfocándose en una verdadera inclusión que se manifieste en acciones concretas, financiamiento adecuado y reformas esenciales.
El consenso emergente es claro: la lucha contra las desigualdades requiere una renovación profunda de los mecanismos globales existentes y una mayor participación de los sectores más vulnerables en los procesos de toma de decisiones. La urgencia de reformar las instituciones financieras globales y el sistema tributario, junto con la necesidad de escuchar y actuar en respuesta a las voces de las comunidades marginalizadas, destacan como pasos imprescindibles hacia un mundo más justo y equitativo. Esperamos que estas propuestas sean el principio de un cambio que logre concretarse antes de que la presidencia del G20 por parte de Brasil concluya.