Ya sabemos que esta polémica está provocada con el único interés en visualizar la nueva marca. Pero queremos dejar constancia de la mala práctica de la empresa Orangina Schweppes en referencia a las relaciones con la comunidad.
En todo caso, evitaremos hablar del producto que publicitan y solo nos referiremos a la empresa fabricante.
Se trata de una nueva bebida energética que tiene necesidad de hacerse un hueco en el mercado y no han encontrado mejor campaña publicitaria que un lema ligeramente insultante para los ciudadanos de una población.
El lema de la campaña dice «Treballa com un suec encara que siguis de l’Hospitalet» (Trabaja como un sueco aunque seas de L’Hospitalet), mensaje del que se desprende que los vecinos de la segunda ciudad de Catalunya, pegada a Barcelona, son unos mantas o, al menos, no llegan al nivel de productividad, compromiso laboral o profesionalidad de los ciudadanos de Suecia. Cabe destacar que en L’Hospitalet hay un gran establecimiento de la cadena sueca IKEA, dato que desconocemos si ha influído a la hora de elegir esta ciudad y la correspondiente comparación!
En todo caso, cabe decir que la campaña ya ha sido retirada después de que el Ayuntamiento haya expresado una queja. Todo el mundo ha conseguido lo que quería. La alcaldesa ha demostrado su liderazgo a un mes de las elecciones y la empresa ha publicitado su producto, mostrando su capacidad de corregir su acción ante un error que han confesado que no era intencionado. Han llegado a decir que el sentido era el contrario.
Queremos hacer notar que, aunque en este caso la crítica era inofensiva, no es ético jugar a hacer este tipo de provocaciones con objetivo publicitario. Si esta técnica avanza, ¿hasta dónde no puede llegar y qué comparaciones más nítidamente racistas no pueden expresarse? Mejor ser críticos de entrada y mostrar nuestro rechazo. No es un sistema razonable ni ético para conseguir la notoriedad de marca.
Fuente: responsabilitatglobal.blogspot.com
Publicada: 1 de mayo de 2011.
