Hace apenas unos meses Greenpeace le sacudió la reja a Nestlé cuando provocó una avalancha en las redes sociales con el tema del aceite de palma y el KitKat.
Leyendo bien el mensaje, General Mills, que produce marcas como Yoplait y Häagen-Dazs, entre otras, anunció que usará exclusivamente aceite de palma procedente de explotaciones socialmente responsables a partir de 2015.
El consumo de productos de esta marca es modesto – alrededor de una décima parte del uno por ciento de la producción mundial- sin embargo, la acción denota una preocupación por el impacto de este tipo de productos en la deforestación de los bosques tropicales, misma que está haciendo que disminuya la biodiversidad, haya más especies de animales y plantas en peligro de extinción, afecte a las emisiones de gases de efecto invernadero y tenga impactos negativos sobre los pueblos indígenas.
Se trata de un buen ejemplo de que en la resposabilidad social es posible y aconsejable aprender en cabeza ajena… es decir, aprovechar las vivencias o fallas de otras empresas para no cometer los mismos desaciertos.
Bien decía Peter Drucker… a veces es mejor aprender desde la ignorancia que desde el conocimiento.
