Cuando se trata de la disparidad salarial entre hombres y mujeres en Hollywood, ni siquiera los investigadores paranormales más famosos del FBI se salvan.
Gillian Anderson, coprotagonista de Los expedientes secretos X, ha atraído la atención sobre la brecha de género en los salarios en las entrevistas previas al estreno de la nueva versión de la serie, que se transmitió este domingo en la cadena estadounidense Fox.
En entrevista con el sitio The Hollywood Reporter, la actriz que interpreta a Dana Scully dijo que para la nueva versión de la serie le propusieron pagarle «la mitad de lo que querían ofrecerle» a su coestrella David Duchovny, que hace el papel de Fox Mulder.
Algunas fuentes declararon a The Hollywood Reporter que a final de cuentas a los actores les pagaron lo mismo. A pesar de todo, Anderson dijo que fue una situación angustiante porque había librado la misma batalla en la versión original de la serie.
Pasaron tres años para que pudiera cerrar la brecha que había entre su salario y el de Duchovny en la década de los 90. Ella peleó porque se había hartado de aceptar algo menos que «un salario igual por un trabajo igual», declaro al sitio web The Daily Beast.
«Creo que es importante que se sepa y que se exponga. Para mí fue desconcertante porque anteriormente me esforcé mucho para que nos dieran un pago justo. Realmente trabajé para lograrlo y finalmente logré algo con ello», dijo.
La brecha salarial en Hollywood ha llamado la atención porque son cada vez más las actrices que alzan la voz. Jennifer Lawrence, ganadora del Óscar, recientemente habló por la causa y dijo que le pagaron menos que a sus coestrellas varones en Escándalo Americano y que era hora de dejar de ser «adorable» a la hora de negociar.
Anderson señaló que entre más cambian las cosas, más parece que siguen igual.
«Incluso en las entrevistas de años pasados la gente me ha dicho: ‘No puedo creer que eso haya pasado, ¿qué sentiste al respecto? Es una locura’. Mi respuesta siempre era: ‘Eso pasó entonces, así son las cosas ahora’. ¡Y luego volvió a ocurrir! Ni siquiera sé qué decir al respecto».
No solo se trata del salario. Durante la primera versión de Los expedientes secretos X, al principio el estudio le pidió a Anderson que se quedara unos cuantos pasos atrás de su coprotagonista al estar en cámara, contó a The Daily Beast.
«Solo puedo pensar que al principio querían que fuera un personaje secundario», dijo. «¡O que, de cierta forma, tal vez ya era un cambio suficiente que una mujer tuviera esta clase de conversación intelectual con un hombre en cámara y que el público ciertamente no podía soportar verlos caminar lado a lado!».
Fuente: CNN Expansión