La discriminación a las personas de color en Estados Unidos es una conducta que se ha normalizado con el paso del tiempo. Se trata de una situación incorrecta e incómoda que tienen que soportar día con día las personas que no son de piel blanca en ese país. Además de ser discriminados, tienen menores oportunidades y están más vulnerables a críticas y actos negativos por parte de la sociedad.
En uno de los filmes donde se representa esta situación es Green Book, una cinta que podría convertirse en la ganadora a mejor película en los Premios de la Academia 2019. Es una película de Peter Farrelly que actualmente tiene cinco nominaciones al Óscar (mejor película, montaje, guion original, actor y actor de reparto) Es un relato real, protagonizado por un refinado pianista afroamericano y un rudo chófer y guardaespaldas italoamericano, que trabaja en un club de Nueva York.
De acuerdo con Farrelly, “hace tres años me crucé en la calle con Brian Hayes Currie, que estuvo en un par de películas mías. Le dije: ‘¿en qué andas?’, y me contó que estaba escribiendo un guión, basado en el padre de un amigo. La historia era sobre un pianista, al cual su sello discográfico lo enviaba de gira por el Sur. A él lo ponía nervioso ir, así que fue al club Copacabana y contrató al guardia más duro, un italiano con educación primaria y que era racista, para llevarlo. Y pese a sus diferencias, los dos se vuelven amigos. Al escuchar la historia solo podía pensar que era broma, no creía que fuera real, pero él me aseguró que absolutamente lo era”.
El racismo es parte de la identidad de Estados Unidos, sin embargo, con el tiempo la sociedad negra se ha convertido en asalariada y de hombres libres. La inferioridad fue aceptada implícitamente por los grupos de piel negra.
Uno de los testimonios más claros de ello se plasma en The Green Book. Un libro editado, escrito y publicado por Victor H. Green, un empleado del servicio postal de Nueva York, residente de Harlem, nacido a finales del siglo XIX.
En 1936 The Green Book salió a la luz, ahí se describió la forma en que debían viajar los negros por Estados Unidos para evitar la discriminación. Este libro data de 1936, época después de la Gran Depresión, muchos años después del esclavismo; con este se pretendió creer que el racismo había quedado atrás.
Con la industria nacional retomando su nivel de producción, la segregación racial se encargó de crear barreras legales para las personas de raza negra. Los estados del sur lucharon por una legislación que combatiera el libre tránsito de los afroamericanos por la Unión Americana, especialmente aquellos que pretendían embarcarse en viajes vacacionales.
Green recopiló sitios de NY donde los africanos eran bienvenidos. En el libro venía una lista de establecimientos locales, como tiendas, restaurantes, hoteles y almacenes que permitían la entrada a todo el mundo por igual.
Tal libro resultó un éxito y la primera publicación tuvo un gran impacto entre los habitantes de piel negra del noreste americano.
«The Green Book» estaba consolidado como un libro de cabecera que recopilaba hoteles, restaurantes, bares y gasolineras donde los viajeros afroamericanos eran bien recibidos.
El libro, además, incluía consejos para manejar, puesto que si llamaban la atención de alguna forma, podrían ser detenidos bajo cualquier pretexto.
De acuerdo con Cultura Colectiva, A la espera de ese momento, transcurrieron 28 años hasta la edición final del polémico libro. El último ejemplar de «The Green Book» fue publicado en 1964, tras la promulgación de la Ley de Derechos Civiles el mismo año, que prohibió –al menos en el papel– la discriminación de cualquier tipo y declaró nula la ley Jim Crow en los estados sureños.
Hoy, a más de 50 años de distancia, el racismo se mantiene como una condición preponderante en los Estados Unidos, a pesar de los amables intentos de Luther King, la aceptación de inferioridad de Victor H. Green o la radical postura de Malcolm X.