Greenpeace ha celebrado una «boda» múltiple en la Plaza de Callao (Madrid) en la que ha unido al actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy; y a los expresidentes José María Aznar y Felipe González con los responsables de Iberdrola, Gas Natural y Endesa, para denunciar el «sometimiento» de los políticos a los intereses de las compañías eléctricas, con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, que se celebra este miércoles 5 de junio.
La ceremonia ha concluido con el despliegue, por parte de algunos escaladores de la organización, de una pancarta de cerca de 90 metros cuadrados desde el edificio Capitol, situado en plena Gran Vía madrileña. El cartel mostraba una gran ilustración de la «foto de boda» de las tres parejas con el mensaje ‘¡Nos casamos! Y el medio ambiente paga la boda’.
El responsable del área de Energía y Cambio Climático de Greenpeace España, José Luis García, ha manifestado que este acto responde a una forma de protesta ante una misión «vergonzosa e inaceptable» como es que «el Gobierno esté sometiendo la política energética a los intereses de Iberdrola».
«No se puede permitir que los intereses generales y del medio ambiente estén sometidos a los requerimientos particulares y privados de una empresa, por muy poderosa que sea -ha precisado-. Si tanto se aman, si tanto se quieren, pues que se casen».
Asimismo, García ha explicado que la compañía eléctrica «está dictando una política energética perjudicial para toda la sociedad», pues a su juicio, ésta «pone freno a las energías renovables, que son las que más empleo dan y las únicas capaces para hacer frente al cambio climático».
Para el responsable de Energía y Cambio Climático, el lema de la iniciativa -‘El medio ambiente paga la boda’- «expresa cómo la connivencia de intereses entre las eléctricas y el Ejecutivo tienen un impacto perjudicial en el medio ambiente».
Además, activista de Greenpeace han acudido a las sedes de las principales compañías eléctricas en otras 12 ciudades españolas, donde han entregado las invitaciones de boda dirigidas a los responsables de cada una de ellas.
José Luis García ha aclarado también que la denuncia que la organización presenta este miércoles ante la Fiscalía Anticorrupción, representa «el rechazo de miles de ciudadanos que comparten la indignación ante esas puertas giratorias entre políticos y empresas». Así, ha indicado que lo que persigue es «aportar una información que es pública para que la Fiscalía investigue si la relación es legal o no».
Por último, ha destacado que si la Fiscalía «detecta hechos punitivos», la ONG pedirá que se actúe y se tomen las medidas necesarias «para castigar esos hechos». «Si por el contrario, resultase que todo lo que se hace es legal, se reforzaría lo que pedimos desde Greenpeace, es decir, la modificación de la Ley de Incompatibilidades para que no se permita que los altos cargos de la Administración Pública pasen a ser puestos muy relevantes en las grandes compañías eléctricas», ha matizado.
Fuente: El Mundo
