Las pilas son artículos con los cuales convivimos todos los días, las utilizamos en el reloj que llevamos puesto, el despertador de la casa, el control remoto de los aparatos electrónicos, los juguetes de los niños y hasta en equipos médicos. Pero poco es lo que sabemos sobre sus componentes y la manera correcta de desecharlas para evitar el aumento de la contaminación y los daños relacionados con medio ambiente.
El desecho inadecuado de estos residuos y posterior exposición prolongada a los elementos tóxicos que las componen, genera daños importantes al medio ambiente y a la salud.
Es por ello que en 2017, Grupo IMU, en coordinación con el Gobierno de la Ciudad de México, a través de la Secretaría del Medio Ambiente (SMA), puso en marcha el Programa de Manejo Responsable de Pilas de Desecho, el cual tiene por objetivo erradicar los daños y la contaminación que estos artículos generan en el medio ambiente y a la salud pública de todas las personas.
Gracias a la colaboración de la sociedad civil, quienes a lo largo de 10 años han depositado sus pilas de desecho en 417 columnas recolectoras en la Ciudad de México, Grupo IMU, a través de este programa, ha logrado recolectar hasta el día de hoy más de 816 toneladas de baterías inservibles, las cuales son enviadas a la empresa “Sistema de Tratamiento Ambiental, S.A, de C.V. (SITRASA), para su posterior reciclaje.
Se calcula que una pila de mercurio puede contaminar 600 mil litros de agua, una alcalina contamina 170 mil litros de agua, mientras una de óxido de plata, 14 mil litros, lo que a su vez ocasiona la muerte de diversas especies. De acuerdo a las estadísticas un ser humano utiliza entre 10 o 12 pilas al año lo cual provoca un total de 635 millones de toneladas que son desechadas a nivel nacional.
“La coordinación de esfuerzos entre autoridades, empresas y sociedad civil es la única manera de lograr proyectos de esta magnitud. A través de este programa se espera la participación de todos a fin de evitar problemas de contaminación y salud pública”, afirma Gerardo Cándano Conesa, director general de Grupo IMU.
Para sumarse a esta iniciativa, creando conciencia y sensibilidad sobre el daño ocasionado al planeta y la importancia de reciclar para mejorar la calidad de vida, es importante recordar las acciones 3R de IMU, con las cuales todos podemos ayudar:
- Reduce. Disminuye la dependencia hacia las pilas utilizando la red eléctrica.
- Reutiliza. Usa pilas recargables, una sola sustituye hasta 300 pilas desechables.
- Recicla. Utiliza medios como el Programa de Manejo Responsable de Pilas de Desecho para asegurar que los componentes de las pilas sean reintegrados a la cadena productiva.
Recuerda que el principal beneficio de esta actividad es saber que las pilas no terminarán en el manto acuífero, ya que una sola pila puede dañar de 170 mil a 600 mil litros de agua.
Comunicado de Prensa.