Los voluntariados corporativos son una herramienta clave para fomentar el desarrollo social y mejorar las condiciones de vida en nuestras comunidades. Estas iniciativas no solo generan impactos positivos en sectores vulnerables, sino que también construyen una cultura organizacional sólida basada en la solidaridad, el compromiso y el trabajo en equipo. Grupo Restaurantero Gigante (GRG) es un ejemplo destacado de cómo las empresas pueden integrar el voluntariado corporativo como parte esencial de su filosofía, promoviendo valores como el servicio y la empatía tanto en el ámbito laboral como en la vida cotidiana de sus colaboradores.
El compromiso de GRG con esta visión los impulsa a aprovechar cada oportunidad para sembrar el hábito del voluntariado entre sus equipos. En el marco de la temporada navideña, la compañía ha puesto en marcha un voluntariado corporativo que refuerza esta cultura de servicio y solidaridad. Esta actividad no solo fortalece los lazos entre colaboradores, sino que también impulsa el cuidado de las tradiciones artesanales mexicanas.
¡Grupo Restaurantero Gigante impulsa el desarrollo social mediante el voluntariado corporativo!
Grupo Restaurantero Gigante (GRG) es una compañía cuya estrategia de responsabilidad social y objetivos la han llevado a comprobar, en diversas ocasiones, que los voluntariados corporativos son una de las herramientas más efectivas para abordar problemáticas sociales y ambientales e impulsar el desarrollo social, impactando positivamente a las comunidades o grupos beneficiados. El voluntariado corporativo puede generar diversos beneficios tanto para las comunidades como para las empresas, ya que ayuda a:
- Subsanar necesidades de los sectores más vulnerables, cubriendo áreas como educación, alimentación o vivienda.
- Fomentar el desarrollo social mediante actividades que mejoren las condiciones de vida en las comunidades.
- Fortalecer la cultura organizacional, al promover valores de solidaridad y trabajo en equipo entre los empleados.
- Mejorar el ambiente laboral, ya que los colaboradores se sienten parte de un propósito mayor, lo que incrementa la motivación y el compromiso.
Por todo ello, GRG ha adquirido el compromiso de realizar diversos voluntariados a lo largo del año, involucrando a sus colaboradores en actividades que refuerzan valores como la solidaridad y el servicio. Su más reciente iniciativa, el voluntariado navideño, destaca no solo por fomentar la participación de su equipo, sino también por preservar la riqueza cultural mexicana a través de la tradición artesanal.
¡Un voluntariado que cambió conciencias!
Cada año, Restaurantes Toks, una de las marcas de GRG, busca integrar la sostenibilidad y el impacto social en sus actividades navideñas. Un ejemplo es su iniciativa Bosque Toks, con la cual la cadena de restaurantes no sólo adopta árboles que, luego de las fiestas son regresados a su hábitat natural, sino que, mediante un voluntariado corporativo, promueve la reforestación para contrarrestar el impacto ambiental. Además, cada año, selecciona a un grupo de artesanas y/o artesanos mexicanos para crear los adornos que engalanan los árboles de Navidad de sus sucursales, una práctica que fomenta la economía local y enaltece las tradiciones artesanales de nuestro país.
Este año, GRG y Toks decidieron dar un paso más allá al incluir a sus colaboradores en un voluntariado corporativo que les permitió aprender el proceso de elaboración de los adornos navideños por parte de un grupo de artesanas seleccionado, este fue la cooperativa Titekite Sansekan (Trabajando juntas, en náhuatl), conformada por mujeres de Chilapa de Álvarez y Zitlala, Guerrero.
Este aprendizaje, directo de las manos de las artesanas, no solo contribuyó a que los colaboradores comprendieran el valor del trabajo artesanal, sino que también generó conciencia sobre la importancia de preservar estas tradiciones, reconociendo el esfuerzo y la dedicación que conlleva cada pieza:
“Al venir a este voluntariado me di cuenta de que parece muy sencillo lo que hacen, pero realmente es algo complejo. Creo que minimizamos mucho la artesanía y por eso son importantes este tipo de voluntariados, porque nos enseñan a valorar el trabajo que hacen los artesanos mexicanos. Muchas veces subestimamos hasta el valor monetario que se le puede dar a una artesanía porque no estamos conscientes de todo el esfuerzo que conlleva hacer estos artículos y no reconocemos todo el trabajo que hay detrás”.
Aldo Martínez, gerente de impuestos en GRG.
¡Promoviendo el aprecio por la artesanía mexicana!
Mediante esta actividad, GRG logró que sus colaboradores se involucraran activamente en una experiencia que ayudó a reforzar el respeto y admiración hacia el trabajo artesanal, así como a fomentar el sentimiento de pertenencia y la identificación de los trabajadores con los valores de su empresa:
“Me enorgullece pertenecer a una empresa que valora mucho la cultura, que siempre está en proyectos que reconocen el esfuerzo de los trabajadores nacionales, ya sea artesanías u otros productos y que inclusive ayuda a que sus negocios crezcan”.
Aldo Martínez, gerente de impuestos en GRG.
Al integrar a sus empleados en esta iniciativa, GRG, fortalece su compromiso con la cultura mexicana, enseñando a sus empleados a valorar la riqueza que estas tradiciones aportan a nuestra sociedad y la importancia del comercio justo, que se ha convertido en el sello distintivo de sus proyectos de responsabilidad social:
“Para mí el que Restaurantes Toks apoye a las artesanas mexicanas es un orgullo y me gusta la idea porque valora el trabajo y esfuerzo de estas personas mujeres que mantienen su hogar y están al frente de sus familias. Yo les diría a todos que apoyen a las mujeres emprendedoras, a las artesanas y que no regateen su trabajo porque es una entrada de dinero para sus familias”.
Angie Morales, encargada de la cafetería en GRG.
Por su parte, las artesanas de Titekite Sansekan encontraron un espacio para compartir su legado cultural, preservar estas técnicas tradicionales y transmitir su importancia:
“Me siento orgullosa por dar a saber lo que yo he aprendido y me dio gusto ver que todos pusieron entusiasmo en aprender, estamos aquí con mucho gusto enseñando de lo que nosotras hacemos, por eso agradezco a Toks por haber escogido a nuestra cooperativa para hacer los adornos y venir a enseñar”.
Inocencia Casarubias, miembro de Titekite Sansekan.
Sin duda, colaboraciones como la que se realizó por medio de este voluntariado decembrino son fundamentales para seguir construyendo una economía más inclusiva y que fomente el apoyo a los productores nacionales, y a lo hecho en México, a la par que se impulsa el desarrollo de nuestras comunidades.
¡GRG lidera el camino hacia un modelo empresarial socialmente responsable!
El voluntariado corporativo organizado por Grupo Restaurantero Gigante esta Navidad demuestra cómo las empresas pueden impactar de manera significativa en sus comunidades y, al mismo tiempo, fortalecer su cultura organizacional. A través de actividades como estas, GRG no solo fomenta sus valores corporativos entre los colaboradores, sino que también enriquece las tradiciones culturales y promueve alternativas sostenibles para disfrutar de nuestras festividades. Este compromiso con la responsabilidad social refuerza su posición como un líder en el sector, marcando el camino hacia un modelo empresarial que prioriza el impacto positivo en la sociedad.
