La adolescencia es un período crucial para el desarrollo de hábitos sociales y emocionales importantes para el bienestar mental. Por lo tanto, es importante brindar un entorno favorable y de protección en la familia, la escuela, los gobiernos y la comunidad en general, según informa Mashable.
Si bien hay muchos factores que afectan el desarrollo saludable de los adolescentes, se ha demostrado que los medios de comunicación, como las redes sociales, tienen un grado de influencia perjudicial. Sin embargo, los especialistas de esta guía de redes sociales para adolescentes no categorizan las plataformas sociales como buenas o malas, sino que advierten a legisladores, educadores, médicos de salud mental, empresas de tecnología, familias y adolescentes sobre la necesidad de un uso y regulación responsable.
Usar redes sociales de manera responsable
La guía elaborada por la Asociación Estadounidense de Psicología (APA) proporciona a distintos grupos de interés una lista completa y actualizada para el uso responsable de las redes sociales por parte de los adolescentes. Con base en diez recomendaciones, se incluyen consejos de sentido común, como monitorear razonablemente el uso de las redes sociales, limitar el tiempo dedicado y otros especialmente relacionados con la comparación social.
El informe también destaca la importancia de monitorear el uso de las redes sociales en los jóvenes y brindarles capacitación en alfabetización en redes sociales para que puedan evaluar críticamente la información que ven en línea y aprender a identificar y evitar la propagación de información errónea.
«Esto es lo que debe suceder, por parte de todos, si queremos mantener a los niños seguros».
Dr. Mitch Prinstein, coautor de las pautas y director científico de la APA.
En particular, las recomendaciones se enfocan en minimizar la exposición a contenido peligroso, incluido el contenido que representa un comportamiento ilegal, autolesionarse, lastimar a otros y alentar los trastornos alimentarios. Sin más preámbulo estas son las diez pautas de APA destinadas a orientar el uso responsable de redes sociales en preadolescentes y adolescentes.
Guía de redes sociales para adolescentes
1. Los jóvenes que utilizan las redes sociales deben ser alentados a utilizar funciones que creen oportunidades para el apoyo social, la compañía en línea y la intimidad emocional, las cuales pueden promover una socialización saludable.
2. El uso de las redes sociales, su funcionalidad y permisos/consentimiento deben adaptarse a las capacidades de desarrollo de los jóvenes. Los diseños creados para adultos pueden no ser apropiados para los niños.
3. En la primera adolescencia (es decir, típicamente de 10 a 14 años), se aconseja la supervisión de los adultos (es decir, la revisión, discusión y orientación continua en torno al contenido de las redes sociales) para la mayoría de los usos de las redes sociales de los jóvenes. La autonomía puede aumentar gradualmente a medida que los niños crecen y adquieren habilidades de alfabetización digital. Sin embargo, la supervisión debe equilibrarse con las necesidades apropiadas de privacidad de los jóvenes.
4. Para reducir los riesgos de daño psicológico, la exposición de los adolescentes a contenido en las redes sociales que representa comportamientos ilegales o psicológicamente inadaptados —incluido el contenido que instruye o anima a los jóvenes a participar en comportamientos de riesgo para la salud, como el autolesionismo— debería ser minimizada, reportada y eliminada. Además, la tecnología no debería dirigir a los usuarios hacia este contenido.
5. Para minimizar el daño psicológico, se debe minimizar la exposición de los adolescentes al «ciberodio», incluida la discriminación, el prejuicio, el odio o el ciberacoso en línea, especialmente dirigido hacia un grupo marginado (por ejemplo, racial, étnico, de género, sexual, religioso, de estado de habilidad) o hacia un individuo por su identidad o apoyo a un grupo marginado.
6. Los adolescentes deben ser examinados rutinariamente en busca de signos de «uso problemático de las redes sociales» que pueden afectar su capacidad para desempeñar roles y rutinas diarios.
7. El uso de las redes sociales debe ser limitado para no interferir con el sueño y la actividad física de los adolescentes.
8. Los adolescentes deben limitar el uso de las redes sociales para la comparación social, especialmente en torno al contenido relacionado con la belleza o la apariencia.
9. El uso de las redes sociales por parte de los adolescentes debe ir precedido de una formación en alfabetización en redes sociales para garantizar que los usuarios hayan desarrollado competencias y habilidades informadas psicológicamente que maximicen las posibilidades de un uso equilibrado, seguro y significativo de las redes sociales.
10. Deben proporcionarse recursos sustanciales para la continua examinación científica de los efectos positivos y negativos de las redes sociales en el desarrollo de los adolescentes.
En general, la guía sugiere que, al igual que los requisitos para obtener una licencia de conducir, los adolescentes necesitan instrucciones sobre el uso seguro y saludable de las redes sociales. Además, insta tanto a las empresas tecnológicas como a los gobiernos a ser socialmente responsables y garantizar la privacidad y seguridad de los adolescentes. Esto significa asegurarse de que el contenido disponible sea apropiado para su edad y desarrollo, y centrarse en la eliminación agresiva del odio cibernético.
