Gwyneth Paltrow intentó alimentarse por una semana con un presupuesto de 29 dólares (unos 448 pesos) y no lo logró. Desde que compartió sus compras para los siete días, muchos en internet criticaron sus elecciones (por ejemplo, ¿por qué tantos limones?), pero ahora ella compartió en su página web las conclusiones de su experimento, afirmando que hay una relación directa entre la brecha salarial de género y la alimentación de las familias.
This is what $29 gets you at the grocery store—what families on SNAP (i.e. food stamps) have to live on for a week. pic.twitter.com/OZMPA3nxij
— Gwyneth Paltrow (@GwynethPaltrow) April 9, 2015
Paltrow se impuso este reto por invitación de su amigo el chef Mario Batali. Llamado SNAP Challenge, el desafío invita a conocer cómo viven las personas que usan el programa SNAP (Programa de Asistencia para la Suplementar la Nutrición, según sus siglas en inglés) en el que familias de bajos recursos en Estados Unidos reciben vales que pueden ser intercambiados por productos alimenticios.
En sus conclusiones la actriz confesó que a solo cuatro días del experimento hizo trampa, pero aún así aprendió mucho de su participación: «Mi perspectiva ha sido alterada por completo por lo difícil que es comer alimentos nutritivos y saludables en ese presupuesto, aun por solo algunos días— un reto al que 47 millones de norteamericanos se enfrentan cada día, cada año, cada semana.»
También reflexionó sobre la relación entre el problema de alimentación y la equidad de género, diciendo que después de la experiencia está aún más comprometida con la causa del salario equitativo:
A muchas mujeres trabajadoras se les pide lo imposible: alimentar a sus familias con un presupuesto que solo puede apoyar a empresas que proveen de alimentos de baja calidad (…) Lo que digo es que todos deberían poder permitirse comprar alimentos frescos y reales. Y si las mujeres recibieran un salario equitativo, las familias trendrían más elección en los pasillos del supermercado y en todos los aspectos de sus vidas.»
Entrevistado para el portal Think Progress, el analista de políticas públicas de alimentación Ed Bolen afirmó que por un lado es bueno que celebridades como Paltrow aborden el tema y creen conciencia, pero también llamó la atención sobre varios fallos del SNAP Challenge. Por ejemplo, este programa está pensado para suplementar la alimentación, no proveerla por completo, así que es falso decir que las familias comen con 29 dólares a la semana. Además, una persona que recibe este tipo de ayuda federal tiene otros retos que la actriz no tomó en cuenta, como el transporte, largas horas de trabajo, el cuidado de los hijos, etc. Para estas personas no se trata de un «reto divertido» sino de una forma de vida que puede ser muy estresante.
En resumen, todo este reto saca a la luz una pregunta más profunda: ¿por qué no creemos en las experiencias vividas de quienes se benefician de programas de este tipo y tenemos que hacer «retos» para conocerlas de primera mano? Después de todo, Paltrow pudo haber entrevistado a mujeres que llevan meses o años viviendo con vales de comida, pero decidió darle su voz al tema en lugar de ofrecer visibilidad a quienes les afecta día a día.