Científicos británicos identificaron una serie de compuestos que podrían conducir a una vacuna que proteja contra todas las cepas del virus de influenza.
Se trata de un grupo de péptidos (proteínas) que se encuentran en las estructuras internas del virus de gripe, los cuales parecen activar los mecanismos de respuesta del sistema inmune.
Como estos compuestos se encuentran en todas las cepas del virus y casi no cambian a lo largo del tiempo, una vacuna que pueda atacarlos ofrecería inmunidad contra todas las variantes de la enfermedad, incluidas la gripe estacional, la aviar y la porcina, afirman los científicos.
La investigación, que aparece publicada en la revista Nature Medicine, fue llevada a cabo en las universidades de Southampton y Oxford, Inglaterra, y la empresa Retroscreen Virology Ltd.
El estudio utilizó un método de análisis en el que se aisló a 41 voluntarios sanos en una unidad de investigación y se les infectó con distintas cepas del virus de gripe.
Este aislamiento permitió a los investigadores mantener condiciones «estériles» para asegurarse de que los participantes no estaban contagiados previamente con algún otro patógeno.
Inmunidad
Cuando los participantes ya habían sido contagiados se les tomaron muestras de sangre a intervalos regulares para observar cómo respondía su sistema inmune a la infección viral.
Los científicos descubrieron que los individuos con niveles más altos de un tipo de células inmunes, llamadas células T, lograron defenderse mejor de la infección.
Notaron que estas células T respondían a los péptidos ubicados en las estructuras internas del virus.
Esto es importante porque a diferencia de las estructuras externas del virus de gripe, que cambian regular y rápidamente para crear nuevas cepas de virus y defenderse de los ataques del sistema inmune, las estructuras internas cambian muy poco y muy lentamente.
Por eso, afirman los investigadores, si se logra desarrollar una vacuna que incremente los niveles de células T para atacar estos péptidos internos se podrá obtener una inmunidad para todas las cepas de gripe.
Tal como explica el doctor Tom Wilkinson, quien dirigió el estudio, «la mayoría de las vacunas de influenza sólo protegen contra las cepas conocidas del virus creando anticuerpos en la sangre».
«Pero el virus de influenza tiene la capacidad de cambiar rápidamente para producir nuevas cepas que se propagan velozmente en todo el mundo escapando de esa inmunidad».
«Si logramos expandir la población de estas células T en la gente utilizando una vacuna, lo cual es perfectamente viable, podremos proteger contra todas las cepas de gripe» agrega el científico.
Todavía, sin emabrgo, serán necesarias más investigaciones para trasladar estos hallazgos a una vacuna que pueda estar disponible en la clínica, dicen los investigadores.
Fuentes: Bbc.co.uk
Publicada: 2 de febrero de 2012.