En todo el mundo existen lugares con marginación, sin embargo, fue Nike la marca que volteó a ver esta situación en Chicago, justo en la zona oeste de la ciudad estadounidense. Ahí el básquetbol es el rey del deporte y por ello varias personas juegan y se reúnen en las canchas.
Cerca de este lugar se encuentra una iglesia, que data del siglo XIX, ésta se encuentra dentro de una comunidad marginada caracterizada por ser un área peligrosa. Justo ahí, Nike comenzó a remodelar el «lugar sagrado» y convirtió a la iglesia en una cancha de lujo para que los jóvenes de las familias desfavorecidas, tengan la oportunidad de abrirse paso ene l mundo del deporte y además, rompan el ciclo de pobreza urbana con el que nacieron.
Nike remodeló una iglesia para convertirla en cacha de básquetbol, ésta se encuentra en un área marginada de Chicago.
Se trata del templo de la Epifanía, el cual fue construido en 1855, sin embargo, tuvo que ser cerrado en 2011 por la disminución de los fieles.
Por ello, Nike decidió comprar el edificio y transformarlo en su totalidad. Lo que hizo la marca fue instalar una cancha de última generación en la sala principal y sus cuartos los convirtieron en vestuarios y en un gimnasio.
Este lugar será designado principalmente al uso de los equipos de básquetbol de escuelas locales y estará abierto al público general todos los sábados.
Con esta acción, podemos afirmar que Nike está cumpliendo con el compromiso que tiene de ser una empresa socialmente responsable.
Son muy pocas marcas las que se colocan como verdaderamente responsables, y es que al hacerlo, no solo ayudan a su economía, sino que también atraen nuevos consumidores, aprovechan más sus recursos y sobre todo fortalecen su relación con varios grupos de interés.
Además de preocuparse a nivel social, Nike ha trabajado por la sostenibilidad y ha buscado la forma de impactar de manera positiva a nivel social y ambiental. En materia ambiental, Nike ha luchado por combatir sus emisiones de carbono, así como de aliviar el daño ambiental hacia el planeta, lo que la ha llevado a producir más del 75% de sus productos con algún tipo de material reciclado.
De acuerdo con Mark Parker, CEO de la empresa, cuando Nike decidió realizar un cambio radical, tanto de manera interna como externa e integrar la sostenibilidad, comprendió que la compañía influye de una manera positiva en el mundo. «Expandimos nuestro propósito como compañía».
Además, Nike se ha dedicado a esforzarse en impulsar la sostenibilidad con campañas y diversas iniciativas que ayuden a concientizar a otras marcas y a la sociedad sobre la importancia de su impulso.
Con ello, Nike está dando el ejemplo a otras marcas para que ellas también contribuyan de manera social y con ello, además de ayudar, su reputación corporativa incrementará por lo que en un futuro, la marca será todavía más confiable.