El Comercio Justo en España, como movimiento económico y social, ha sufrido impactos de distintas maneras por la crisis. En 2010, y según el informe elaborado por la Coordinadora Estatal de Comercio Justo (CECJ), la facturación en España de estos artículos alcanzó los 22’5 millones de euros. Esto supone un 24% más respecto a 2009 y un 33% desde 2008, cuando estalló la crisis. La cifra recoge las ventas realizadas por las organizaciones miembro de la CECJ y las de los productos que cuentan con la certificación del sello Fairtrade.
Este dato constituye una buena noticia. Sin embargo, es necesario matizarlo y analizarlo. Si bien durante 2010 la venta de productos certificados aumentó en un 82%, las ventas de las organizaciones de la CECJ descendieron un 10,8% en el mismo periodo. Hasta el 2008, los artículos con certificación se comercializaban casi exclusivamente a través de las entidades de la Coordinadora, pero a partir de esa fecha también se distribuyen en grandes superficies, supermercados, máquinas de “vending” y cadenas de cafeterías, lo que explica su ascenso. Por su parte, los principales espacios de venta para las organizaciones son sus propias tiendas y otros pequeños comercios (herbolarios, tiendas de artesanía y regalos, etc.), que sí han notado los efectos de la crisis.
Uno de los hechos que puede explicar el aumento de la demanda en grandes superficies y supermercados es el desarrollo de campañas de difusión y sensibilización que las organizaciones de la CECJ vienen realizando desde hace años. Esta demanda potencial se ha convertido en nuevos consumidores “justos”, a través de estos nuevos canales de venta.
En cuanto a las preferencias, 7 de cada 10 productos vendidos por las organizaciones de la Coordinadora Estatal de Comercio Justo son de alimentación. Y, dentro de ellos, fundamentalmente café, azúcar y cacao. Sólo estos tres generan las tres cuartas partes de las compras de alimentación. Un sector que ha ido ganando terreno frente a la artesanía, en claro retroceso. Así, mientas que la alimentación apenas ha sufrido el impacto de la crisis (incluso ha crecido un 0,4%), la artesanía ha registrado una bajada del 44%.
Desde el año 2000, las ventas de Comercio Justo se han triplicado. Pese al crecimiento, España todavía se encuentra lejos de la media europea, con un gasto medio anual de 478 euros por mil habitantes, mientras que esta cifra en el resto de Europa es aproximadamente diez veces mayor.
En España, los productos de organizaciones de la CECJ proceden de 40 países: 16 de ellos latinoamericanos, 11 asiáticos, 10 africanos, 3 de Europa y Oriente Próximo. Por sectores, la alimentación llega mayoritariamente de América Latina (42,9%), seguida de Asia y África. Sin embargo la artesanía de Comercio Justo procede de países de América Latina y Asia, en un porcentaje similar (cercano al 40%), y en un 20% de África.
Los artículos de Comercio Justo en España son elaborados por 125 grupos productores. En gran parte se trata de cooperativas (campesinas o de artesanos), empresas de carácter social o asociaciones. Sus trabajadores y trabajadoras reciben un salario que les permite vivir dignamente (igual ellos y ellas) y realizan su tarea en condiciones laborales adecuadas.
Además, llevan a cabo su producción a través de técnicas respetuosas con el medio ambiente y su entorno natural. En estas entidades no hay explotación infantil, y se fomenta la participación de la mujer en la toma de decisiones.
Casi el 90% de estas organizaciones productoras abastecen al mercado español desde antes de 2007, y cerca de la mitad desde hace una década. Esto muestra la estabilidad de las relaciones comerciales, lo que constituye otro de los principios fundamentales de esta forma alternativa y solidaria de comercio.
El Comercio Justo en España es un sector muy diverso en cuanto a canales de distribución y productos, y un movimiento con cada vez más actores, cada vez más complejo, rico y con más presencia en la sociedad.
Fuente: Ucm.es
Por: Antonio Baile Antúñez, Presidente de la Coordinadora Estatal de Comercio Justo, España.
Publicada: 7 de octubre de 2011.