Hay todo un debate alrededor del tema de la importancia relativa del gerente en la deserción de los empleados. Para unos es importante, para otros, irreletanve. El tema lo resume Ed Frauenheim en Workforce Management.
Mientras muchos empleadores – o empresas empleadoras – sostienen que la relación gerente empleado es la principal causa por la cual los empleados abandonan el empleo, cada vez más expertos sostienen los gerentes no tienen mucho que ver, pues lo que más citan los empleados mismos es estrés y salarios.
Sin embargo, algunos expertos sostienen que enmendar las relaciones entre los gerentes y sus subordinados es un tema vital en este momento. Los gerentes cumplen un rol fundamental en inspirar a los trabajadores en empresas que suben y bajan, acosadas por vaivenes del mercado y desconfianza generalizada. Los estudios realizados muestran que el compromiso de los empleados con el lugar donde trabajan ha caído notablemente durante la recesión. Y a consecuencia de las reducciones de personal, del congelamiento de los salarios y de muchas otras medidas para recortar costos, muchos empleados no ven la hora de abandonar sus firmas.
Para la consultora empresarial Karon Lojeski, para tejer una red cohesionada de empleados las empresas dependen de los gerentes. “Para mí, los gerentes importan más que nunca,” dice.
Linda Devlin, de la consultora Accenture, también dice que los jefes son más importantes que nunca: “la importancia ha crecido en términos de sentimientos conectados a la organización y no sentirse perdidos en un agujero negro”, dice.
Según Gallup, la firma de investigaciones, la relación con el gerente es el principal factor del compromiso de los empleados, representando por lo menos 70% del nivel de compromiso de un
¿Influencia exagerada?
Sin embargo, dicen otros, no se puede atribuir directamente a los supervisores la enorme carga e insatisfacción. Los gerentes nunca fueron el único factor en la retención de empleados, dice Jack Wiley, director ejecutivo de Kenexa. Wiley estudió datos que se remontan a 1994 y descubrió que los principales factores de retención se mantienen constantes: confianza en el futuro de una organización; reconocimiento por los aportes personales; oportunidades para crecer y desarrollarse y un buen encaje entre el trabajo y las habilidades de la persona. Los gerentes influyen en el componente de reconocimiento a la tarea pero tienen un poder limitado con respecto al componente de confianza en la organización.
Un rol muy exigente
Los argumentos a favor y encontra de la importancia de los gerentes son muchos para ambas posiciones, pero en definitiva, la cuestión es que tienen una tarea bastante pesada. Mirshokrai (Accenture) dice que supervisar empleados es más difícil ahora de lo que era cuando ella ascendió a gerente de la compañía 15 años atrás. Y que eso se debe en parte al surgimiento de los equipos virtuales y a los desafíos de comunicación que plantea el tener que dirigir a distancia.
Dadas estas exigencias, las empresas deberían ayudarlos a desempeñar bien su tarea. Henry Mintzberg, profesor de la universidad de McGill opina que las empresas deberían desterrar culturas que limitan a los gerentes en su tarea de liderar equipos. En primer lugar, reclama que se termine con los planes de incentivos que distinguen a determinados individuos. También que deberían dejar de castigar a los empleados cada vez que no logran los números trimestrales a que se aspira. “Mucha de esa presión del mercado de valores ha tendido una zanja entre el gerente y sus empleados”, dice Mintzberg.