El Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) para “alimentos chatarra” y refrescos incentivará el consumo de estos productos y no servirá como herramienta para frenar el incremento de la obesidad en el país, señaló Carlos Kasuga Osaka, presidente de Yakult México.
“Con impuesto no se logra, sino al contrario. Es con educación, de los maestros y de la familia en lugar del impuesto. No creo que el mexicano por que le subieron o cueste más cara la Coca Cola, las conchitas o los endulzantes vaya a dejar de consumirlos. Repito, es con educación como se hacen las cosas”, opina el directivo.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Kasuga Osaka consideró que las reformas estructurales como la Hacendaria, que modificó la ley del IEPS, Impuesto Sobre la Renta y la del Impuesto al Valor Agregado, no generará crecimiento en la economía mexicana, ya que en su opinión la solución proviene de la innovación y la educación.
“México necesita un verdadero cambio sobre todo en lo educativo, porque con educación se quita la violencia y otros problemas. Si el gobierno va a cobrar más impuestos, creo que debe dar mejores servicios como carreteras, infraestructura, calles, escuelas y maestros mejores pagados”, dijo.
Todo negocio, añadió Kasuga, se construye a base de innovación y uno de los principales problemas de México es la falta en investigación y desarrollo de productos. “En Yakult tenemos tecnología, limpieza y ambiente laboral, eso nos ha hecho ser una empresa fuerte”, comentó.
Crece Yakult
Kasuga dijo que su compañía todavía tiene potencial para su expansión en otras regiones como Estados Unidos y Centroamérica, donde actualmente exporta sus productos. En México, la compañía vende 3 millones 500 mil frascos diarios de Yakult.
“Se puede ir a otras regiones, nosotros ya exportamos a Estados Unidos, Centroamérica y el mercado es grande nunca vas a satisfacerlo al 100%, hay que trabajar más”, comentó.
Para el directivo, la disputa por el mercado es férrea y “la competencia sólo ve qué sale de nosotros para copiarnos”, apuntó.
Consideró que uno de los retos principales para los empresarios es sobreponer los intereses del país a los de su compañía, ya que de lo contrario la falta de honestidad y bajos salarios afectarán el desarrollo del país.
Fuente: El Universal