La donación de órganos no es un simple problema médico; se trata de una situación de responsabilidad que envuelve a toda la sociedad, y como integrantes de ésta, concierne de igual manera a las empresas.
Un trasplante es la sustitución de un órgano o tejido que ya no funciona con el objetivo de restituir las funciones perdidas. En muchos pacientes, el trasplante es la única alternativa que puede salvarle la vida y/o recuperar la calidad de la misma. Los trasplantes de órganos constituyen un logro terapéutico, vinculado históricamente al propio desarrollo cultural de la humanidad.
Pueden necesitar un órgano las personas con insuficiencia renal, hepática, cardiaca, pulmonar, ceguera, leucemia, entre otros padecimientos. Ninguna persona está exenta de necesitarlo o ser beneficiada por un trasplante.
Es en este contexto que la cultura de donación de órganos debiera ser impulsada con mucha mayor fuerza de lo que actualmente se hace. Empresas que pudieran de forma natural y estratégica canalizar programas de RSE en esta área son: aseguradoras, hospitales, laboratorios, proveedores de insumos y material médico y refrigerante, entre muchos otros.
El diseño aquí presentado, para el Hospital Alemán en Argentina, resume de forma elegante y contundente la esencia de la donación de órganos… Darle de la vida propia a otro.