Le brecha de género no se da solamente en salarios, sino en muchos otros aspectos. En México, aunque las mujeres representan el 38% de la Población Económicamente Activa (PEA), según datos de 2013 de la Secretaría del Trabajo, y son la cabeza del 25% de los hogares, el porcentaje de las que participan en el sistema financiero es muy pequeño.
Según el Instituto del Fondo Nacional para el Consumo de los Trabajadores (Infonacot), de las mujeres que pertenecen a la PEA, solo el 30% participa en el sistema financiero. Con el objetivo de aumentar este número, la organización acaba de presentar la Tarjeta Mujer Fonacot-MasterCard, un producto financiero dirigido a trabajadoras cuyo empleador esté afiliado al Infonacot.
Con esta tarjeta, las trabajadoras pueden acceder a préstamos equivalentes a hasta 4 meses de su sueldo, con un tasa de interés preferencial de 24% para el plazo de 18 meses y de 26% en el plazo de 24 meses, en el nivel de descuento del 20%. El pago del crédito se hace vía nómina y la autorización toma entre 12 y 48 horas. Además, también se puede acceder a otros servicios, como un seguro de apoyo a la educación, seguro de cuidado de padres, seguro para viajes y asistencia médica.
Para el Infonacot, esta iniciativa es una forma de incorporar a su trabajo la perspectiva de género, ya que la tarjeta permitirá a las más de 6 millones de mujeres elegibles la oportunidad de participar no solo en el desarrollo personal y en el de sus familias, sino en el de toda la sociedad.
En definitiva, productos como este son necesarios en nuestro país para impulsar la economía y la independencia de las mujeres trabajadoras. Sin embargo, la tarjeta, que es de color rosa, demuestra que todavía hace falta un poco más de investigación e imaginación al momento de mercadear y vender productos y servicios dirigidos a mujeres. El color es ciertamente un estereotipo y responde a prejuicios sobre las preferencias de las trabajadoras, ya que las tarjetas de banco suelen ser de colores como gris, azul marino o negro. Sería más inteligente ofrecer la opción de personalización del color, encontrar una forma innovadora de denotar que es una tarjeta solo para mujeres, o simplemente quedarse con los colores tradicionales.
Los requisitos y características completos pueden encontrarse en la página del Instituto Fonacot.