México y el mundo atraviesan por una época complicada ante la llegada del COVID-19, y los efectos que éste ha tenido en el sector salud y en la economía a causa de las medidas para contener el virus y evitar que se esparza. Aunado a ello, de acuerdo a Animal Político, se prevé que el confinamiento obligatorio también pueda agravar la situación de desigualdad de género que ya viven las mujeres en cuanto a trabajo doméstico y violencia intrafamiliar.
«Las mujeres mexicanas han sido por años víctimas de violencia en diversas manifestaciones», refirió el subsecretario de Prevención y Promoción de Salud, Hugo López Gatell, durante la conferencia diaria sobre COVID-19.
La presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (inmujeres) aseguró que, en esta situación de contingencia en que el cómo nos hacemos cargo las unas de los otros y los otros de las unas, es el centro de la respuesta a este problema de salud pública, el trabajo de cuidado no es equitativo ni igualitario. Aseveró que, en nuestro país, las mujeres trabajan tres veces más en cuidados domésticos y cuidado de personas que los hombres, dejando una marcada diferencia de 34 contra 14 horas semanales, cifra que se ha aumentado siete minutos en los últimos años.
Considera que esta es la oportunidad perfecta para que tanto hombres como mujeres y niños se involucren en los temas de cuidado que son centrales, organizar de diferentes formas el trabajo en casa, y reconocer que este tipo de actividades no se limitan solamente a las mujeres.
Subrayó que hay estudios que demuestran que los hombres que se dedican al cuidado de sus hijos y llevan a cabo labores domésticas son menos violentos, por lo que lo ve como un medio para reducir la violencia contra las mujeres.
Hay que tener presente que 9 millones 229 mil 211 hogares tienen al frente a una mujer, y 2.2 millones de mujeres son trabajadoras del hogar. En estos momentos de confinamiento debemos ser solidarios; apoyarlas para que se puedan quedar en casa.
Recalcó además que este período de confinamiento no es razón para aceptar ningún tipo de violencia, a lo que continuó diciendo que los servicios de atención a la violencia contra las mujeres son parte de los servicios esenciales y están funcionando con normalidad a disposición de las mujeres.
La directora general del Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva de la Secretaría de Salud, Karla Berdichevsky, subrayó que si alguna mujer vive violencia o alguien observa que una mujer está viviendo violencia, se puede llamar al 911, donde tienen la capacidad para atender los casos y canalizar a las personas a las instancias de ayuda pertinentes.
Explicó que hay líneas telefónicas disponibles para orientar en temas clave de salud, con personal capacitado e información actualizada para las mujeres, adolescentes y niñas que puedan tener necesidades específicas en materia de salud pública durante la epidemia, tales como la línea materna (800 628 3762), donde se proporciona información sobre signos de alarma y posibles complicaciones durante el embarazo; la línea Planificatel (800 624 6464), donde se otorga información precisa sobre planificación familiar y métodos anticonceptivos; o la Línea de la vida (800 911 2000), donde se proporcionan recursos de salud mental.
En las 32 entidades federativas cuentan con Centros de Entretenimiento Infantil para los hijos de las personas cuidadoras.
Afirmó también que los servicios de salud están preparados para garantizar la atención oportuna.