Artículo 3 de 3
Generalmente todos imaginamos lo que queremos tener o como queremos vivir, pero muy pocos nos imaginamos en que personas u organización debemos convertirnos para poder ser y entonces poder tener y poder vivir; por eso me gusta la máxima “ Llama las cosas que no son como si fuesen” es decir actúa y habla conforme a lo que has imaginado y así poder ser y poder vivir a través de tener lo que requieres en cada momento con excelencia y responsabilidad social.
Con todo esto, al actuar en pro de un comportamiento ético y la construcción del bien común, el resultado esperado es, que conscientes de un mínimo necesario, se mitigue y elimine la necesidad de crear más clínicas, reclusorios, elementos de seguridad, dependencias regulatorias, etc. Es decir todo aquello que no agrega valor.
Por lo que es necesario cocrear una sociedad sana y competitiva, y enfocarnos más en establecer las causas raíz que faciliten el desarrollo, el bienvivir y la realización del ser humano. Es preferible que los impuestos y el tiempo se inviertan en infraestructura y de una manera productiva en todo aquello que agrega valor en todas las áreas de responsabilidad de nuestra vida, organización y nación, y así potenciar el desempeño y competitividad de las personas, de la organización y de la nación.
Es por ello que se vuelve fundamental, que también, las acciones de los trabajadores y su sindicato, sean encaminadas en adoptar el modelo de Responsabilidad Social, comprenderlo, gestionarlo y colaborar con el gobierno, instituciones, medios de comunicación, educación y empresas para lograr empleos autosustentables, que generen sus propios servicios en la comunidad, que logren en conjunto microeconomía, cooperativas, pequeñas y medianas empresas, para generar empleo de tal manera que la oferta de trabajo sea mayor que el número de trabajadores y por ende suben salarios, prestaciones y beneficios, así como crear sus propias redes sociales de autoayuda para los diferentes tipos de necesidades como relaciones conyugales, paternidad, salud integral, superación personal, codependencias y sueños legítimos y que con todo esto se pueda enfrentar de mejor manera cualquier otra crisis global.
Por último, es decirles que para mí ha sido un privilegio participar en la construcción de la norma internacional ISO 26000 de Responsabilidad Social, donde este documento, su estructura y contenido da directrices para lograr conocer en parte en que debemos convertirnos para poder ser y dar identidad a la persona y organizaciones, pero sobre todo para poder ejercer el carácter, de tal manera que nuestro “si” sea “si” y nuestro “no” sea “no”, que no obedezcamos a intereses particulares o de grupo si no que estos se consideren para construir el bien común.
ISO 26000 es un buen comienzo para informar, formar y asesorar a las personas y organizaciones en el comportamiento internacionalmente esperado e innovar en nuevos roles y responsabilidades, vinculándonos para potenciar el alcance y sus beneficios, así como valorar la vida bajo una nueva perspectiva, no por la vida misma, sino por el potencial que lleva cada persona y organización para promover y evolucionar en una mejor sociedad con sentido humano que preserve la vida misma con un bien vivir responsable. Creo que este es un buen momento para fortalecer lazos entre los públicos interesados, para poder crear conexiones emocionales que inspiren, motiven y den esperanza actuando con responsabilidad social al manifestar sus principios, valores, solidaridad y sentido humano en tiempos buenos y difíciles.
Aunque es un privilegio ser la mejor persona, organización o nación en el mundo, los invito a que cada uno sea lo mejor para el mundo, como ciudadano, trabajador, organización, sociedad y en primer lugar para la familia, aplicando un comportamiento de “Excelencia y Riqueza Social” como modelo, hábitos y conductas, para que estas sean incorporadas como principios y valores desde la niñez; fortaleza de toda Sociedad.
ISO 26000 es una visión o imagen que cualquiera que actuare conforme a ella podrá ser y vivir el potencial que cada persona, organización y nación tiene. Y aunque tardare, con paciencia y perseverancia, llegaremos a ser, tener y vivir lo que nos imaginamos.
Ismael Higareda
Ingeniero Quimico y de Sistemas por el ITESM con Maestría en Investigación de Operaciones, Diplomado en Japón en Técnicas y Herramientas Japonesas y con varios Diplomados en Responsabilidad Social, Ismael Higareda es un experto en el tópico de la RS en cuestiones de sindicalismo, temas organizacionales y liderazgo emocionalmente inteligente. Pertenece al Comite Espejo de ISO 26000, a la Delegación Mexicana ante plenarias internacionales de ISO 26000 y al Comite de la Norma Mexicana de Responsabilidad Social.
Actualmente es Consultor en el establecimiento de organizaciones de aprendizaje en «Excelencia y Riqueza Social» que se compone de Excelencia Operativa y Crecimiento, Responsabilidad Social y Desarrollo Sustentable, Filantropia Organizacional y Liderazgo emocionalmente inteligente.