Compartir algunas fórmulas para adelgazar, es una de las actividades que las personas que sufren de anorexia o bulimia, están haciendo.
Ellas, están usando hashtags en las redes sociales para hacer más fácil su contenido y de esta manera más personas lleguen a estas recetas.
De acuerdo con una investigación de la BBC, a pesar de que Instagram, propiedad de Facebook, tiene una lista de hashtags que no se pueden usar por promover malos hábitos alimenticios, los usuarios logran pasarse por alto esos filtros de contenido.
Por eso la plataforma ha añadido algunos hashtags populares a la lista de etiquetas bloqueadas.
También ha agregado advertencias que explican el peligro de acceder a ciertos contenidos.
Por ejemplo, si buscas #loseweight (pierde peso) #anorexia o #bulimia, verás un mensaje antes de acceder a las publicaciones en el que se advierte que el contenido relacionado con esas palabras “puede causar daños e incluso llevar a la muerte”.
A pesar de que Instagram tiene una lista de hashtags que no se pueden usar por promover malos hábitos alimenticios, los usuarios logran pasarse por alto esos filtros de contenido.
Si haces clic en “más información”, se abre una ventana (en inglés) que ofrece tres opciones:
- hablar con un amigo
- contactar una línea de ayuda
- obtener consejos y apoyo
Pero si haces clic en “mostrar publicaciones” puedes acceder al contenido.
Cabe mencionar que desde que nació, Instagram ha hecho que algunos términos no puedan ser buscados.
La idea es evitar que los usuarios accedan directamente a imágenes desagradables o chocantes, y también a posts que promueven trastornos alimenticios.
Sin embargo, en las investigaciones de la BBC se descubrió que algunos términos que promocionan la bulimia todavía podrían buscarse y que Instagram incluso sugería opciones alternativas que usan las personas que tratan de fomentar esos hábitos.
En uno de los casos, la red social ofreció hasta 38 alternativas de un término popular entre bulímicos y anoréxicos en la plataforma.
Como respuesta, Instagram agregó esos hashtags y algunos otros relacionados con el tema de su lista de términos que no se pueden usar.
La BBC no tuvo acceso a esa lista específica de etiquetas bloqueadas, pero Insgram aseguró que seguirá trabajando para restringir ese tipo de actividades en su sitio web.
De acuerdo con un vocero de la empresa, en Instragram no se tolera el contenido que fomenta los desórdenes alimenticios y usamos potentes herramientas y tecnologías -incluidas las denuncias a través de la app y aprendizaje automático– para ayudar a identificarlo y eliminarlo.
“No obstante, reconocemos que es un problema complejo y queremos que la gente que tiene problemas de salud mental pueda obtener apoyo en Instagram siempre y cuando lo necesiten”.
Una de las maneras en que los internautas se saltan los filtros de Instagram y otras redes sociales es escribir mal deliberadamente el nombre de la etiqueta que van a usar.
Instagram, al igual que la mayor parte de las redes sociales, no usa moderadores para buscar de manera proactiva el contenido que va contra sus normas. En lugar de eso, confía en que los usuarios denuncien ese contenido, y los moderadores revisan lo reportado.
Algunas organizaciones que ayudan a personas que sufren de anorexia y bulimia han pedido a las redes sociales más responsabilidad en lo que respecta a su política de contenido.
Por ejemplo, Tom Quinn, de Beat, una ONG británica especializada en ese tipo de trastornos dijo que la situación ideal es que el contenido no pueda buscarse y que sea eliminado, pero si la gente todavía puede buscar contenido dañino para su salud, al menos debería ver una advertencia.
Y es que muchas de estas publicaciones de esta línea siguen siendo accesibles.
Instagram prohíbe en sus normas contenido que “promueva o glorifique los desórdenes alimenticios”.
“Los expertos con los que trabajamos nos dicen que la comunicación es la clave. Y que unir fuerzas para ofrecer ayuda y facilitar la recuperación es importante”.
“Si no pueden encontrarlo en Instagram, lo buscarán en otros lados»