La idea de que su vida se había acabado pasó muchas veces por su mente. A algunos les tomó varios meses o años aceptar su discapacidad, que los accidentes por los cuales estaban ahora en silla de ruedas les habían arrebatado más que la funcionalidad de sus piernas.
Son jóvenes que participan en el Programa de Integración Laboral para Personas en Sillas de Ruedas, en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, y quienes afirman que el tener un empleo les permite integrarse más a la sociedad y cambiar su percepción sobre ellos mismos.
Los jóvenes del Programa forman parte de las instituciones Vida Independiente y la Fundación Humanista de Ayuda a Discapacitados (FHADI) que atienden a personas con discapacidad motriz a fin de que puedan integrarse a las actividades sociales y laborales acordes con sus habilidades.
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