Los Ingenieros Osbaldo Ysaac García Ramos y Néstor Antonio Morales Navarro, catedráticos de Ingeniería de la Universidad del Valle de México Campus Tuxtla, desarrollaron un proyecto de tecnología de punta para la medición y comparación de hélices de barcos y su mantenimiento industrial para la Secretaría de Marina (SM).
El proyecto es financiado por la Secretaría de Marina y el Conacyt, y nace de la necesidad que tiene la SM, del mantenimiento que debe hacer a las hélices de sus barcos que están anclados en el astillero que se encuentra en Salina Cruz, Oaxaca.
El mantenimiento hace tiempo era prácticamente manual, y la hacían los operadores de los barcos; sin embargo, y gracias a la Maestría en Ciencias en Ingeniería Mecatrónica que realizaron los docentes Osbaldo Ysaac y Néstor Antonio Morales, desarrollan un servidor, un proyecto denominado Escáner Tridimensional para Objetos Grandes.
Lo que hace el proyecto es un escaneo, toma imágenes en diferentes posiciones de una hélice del barco dañado, y mediante esas imágenes realiza lo que se llama “procesamiento digital de imágenes”, con lo que se obtiene el modelo tridimensional de la hélice.
“¿Para qué nos sirve esto a nosotros o para que le sirve esto a la Secretaría de Marina?, bueno, obteniendo el modelo tridimensional de la hélice podemos generar moldes de mantenimiento que son los que van a utilizar en la Secretaría para dar un mantenimiento más eficiente y preciso a sus diferentes hélices”, comenta el profesor Osbaldo Ysaac.
El equipo, agrega el docente, es un manipulador robótico de cinco grados de libertad; utiliza tecnología de nueva generación, con motores de alta precisión, cuenta con un sistema de visión que se llama “sistema estereoscópico de visión activa” y además tiene una computadora central que es la que adquiere y guarda toda la información para posteriormente ser procesada y obtener el modelo tridimensional de la hélice.
El principal argumento de la Secretaría de Marina para lanzar la convocatoria a las universidades a crear un proyecto que ayudara en el arreglo y mantenimiento de las hélices de los barcos, fue que tuvieran una herramienta para eficientar el mantenimiento, reducción de costos y de tiempo de las hélices. Si una hélice no tiene buen mantenimiento el detalle es que cuando salen a altamar las embarcaciones, las hélices dejan de funcionar correctamente; una hélice cada vez que sale a altamar puede chocar con un arrecife, tener fisuras y esto va deteriorando su funcionamiento.
Con el Escáner Tridimensional para Objetos Grandes, se reducen tiempos y costos, ahora el mantenimiento de una hélice es de una semana, cuando tiempo atrás era de tres semanas; el proyecto está diseñado para dar mantenimiento a cualquier tipo de barco, desde un barco que le llaman “Ballenera” que es un barco que tiene una hélice de tres aspas, hasta hélices de nueva generación que le llaman hélices de “paso variable” para barcos con longitud de 50 a 100 metros.
“Una hélice tiene un costo que va de los 300 mil pesos a millones de pesos, según el tamaño del barco; las hélices no tienen un tiempo de vida determinado, no podemos decir que tengan un año o dos de vida. Lo que sí podemos comentar es que con este proyecto la hélice puede ser reparada y prolongar su funcionamiento”, menciona el Maestro Osbaldo Ysaac.
En Salina Cruz, Oaxaca, hay un astillero que es un centro de mantenimiento y reparación de fabricación de barcos, con este proyecto no solo se reparan barcos mexicanos, sino los que anclan ahí, como son barcos japoneses, españoles, ingleses, etc. “Con el escáner tridimensional la Secretaría de Marina va a facilitar el mantenimiento a barcos incluso que no sean nacionales”, señala el docente de UVM Campus Tuxtla.
Finalmente, el profesor Osbaldo Ysaac García Ramos comentó que en este proyecto participaron también cinco estudiantes de la UVM Campus Tuxtla, básicamente del área de Ingeniería Mecatrónica, “el apoyo de los jóvenes fue en el desarrollo de algunas etapas de componentes electrónicos al sistema, porque el sistema se divide en dos etapas, la primera etapa es la del manipulador robótico y la segunda etapa es la parte de software que realiza el procesamiento y la generación del modelo tridimensional de la hélice.
“Sin duda, el proyecto costó mucho trabajo, porque tiene muchas horas atrás de trabajo de escritorio, de trabajo de horas máquina, de planeación. Sin embargo, con dedicación se pueden lograr muchos éxitos”, concluye el docente de UVM Tuxtla.
Comunicado de Prensa