La ejecución de la Copa Mundial de Fútbol en Sudáfrica es uno de los sucesos con más contrastes y paradojas en la historia. Por un lado se efectua el evento deportivo más grande del orbe, y por otro, éste sucede en el continente con más carencias de la historia.
Con este marco, Greenpeace, la organización no gubernamental con fines ecológicos fundada en 1971, ejecutó una acción que por sí misma ha dado la vuelta al mundo, otorgándole un publicity enorme.
Apenas a un par de horas de distancia de Johannesburgo, se encuentra la pequeña aldea rural de Jericó, cuya precaria situación económica no permite a sus habitantes pagar el transporte para llegar a un estadio, mucho menos para comprar una entrada a alguno de los partidos de fútbol que actualmente se llevan a cabo en su propio país.
Sin embargo, el que no puedan hacerlo no les impide estar interesados en el evento, por lo que Greenpeace les llevó la Copa hasta su poblado a fin de que pudieran ser testigos de los juegos gracias a la instalación de un salón público con pantallas y audio que funcionan con energía solar.
Estudiantes de la secundaria Madiba-a-Toloane instalaron en el techo de la escuela, con el apoyo de Greenpeace África, 26 paneles solares de 120 watts, que alimentan pantallas gigantes de televisión de alta calidad y un equipo de sonido, conectados a una sala, que es de entrada libre con capacidad para 600 personas.
El proyecto Jericó es un hecho sin precedentes para Greenpeace África porque vincunla el entretenimiento con la educación y demuestra que la energía solar puede ser la solución para la crisis energética de Sudáfrica. Todo el proyecto ha costado unos seiscientos mil Rands (77,766 dólares), incluyendo instalación, formación y transmisión de todos los juegos.
Después del evento, los paneles solares serán donados a la escuela y serán utilizados para cubrir sus necesidades de electricidad.
La acción es un escaparate gigante para que la IP gire su mirada al proyecto y pueda considerarlo como una alternativa viable para su responsabilidad social, ya que genera resultados de triple bottom line en una sociedad que demanda a gritos proyectos con un perfil para base de la pirámide.