La Oficina de Protección Ambiental (EPA por su sigla en inglés) de Estados Unidos acusó este jueves a Fiat Chrysler de utilizar un software que permite un exceso de emisiones en unas 104,000 camionetas vendidas desde 2014, en un caso que se asemeja al que le costó miles de millones de dólares a Volkswagen.
«El no revelar (el uso de) este software que afecta las emisiones en el motor de un vehículo es una grave violación de la ley, que puede resultar en una peligrosa contaminación del aire que respiramos», dijo Cynthia Giles, administradora asistente de la oficina de cumplimiento de la EPA, en un comunicado. «Seguimos investigando la naturaleza e impacto de estos dispositivos. Todas las automotrices deben jugar bajo las mismas reglas, y seguiremos haciendo que las compañías que ganan una ventaja competitiva injusta e ilegal se responsabilicen por ello», agregó.
El software, cuya utilización genera emisiones de óxidos de nitrógeno mayores a las permitidas por la Ley del Aire Limpio ( Clean Air Act), fue colocado en las camionetas Jeep Grand Cherokee y Dodge RAM 1500 con motores diésel de 3 litros vendidas en Estados Unidos entre 2014 y 2016.
La medida de la agencia es similar a la que tomó en un principio con Volkswagen, que esta semana acordó pagar 4,300 millones de dólares, casi el equivalente a lo que vende en todo el mundo en una semana, para borrar los cargos criminales en su contra en Estados Unidos por trucar algunos motores diésel con el objetivo de falsear los resultados de las pruebas de emisiones.
La ley ambiental estadounidense exige que las productoras de autos demuestren que sus vehículos cumplen con los estándares federales de emisiones para controlar la contaminación. Es por ello que, mediante un proceso de certificación, deben declarar el uso de cualquier software conocido como dispositivos auxiliares de control de emisiones que pueda alterar cómo este vehículo emite gases contaminantes, explicó la EPA.
Fiat asegura que cumple con la ley
» Fiat Chrysler no reveló a la EPA la existencia de ciertos dispositivos auxiliares de control de emisiones en sus aplicaciones para obtener la conformidad de las camionetas Jeep Grand Cherokee y Dodge RAM 1500 del 2014, 2015 y 2016″, denunció la oficina.
Sin embargo, la empresa dijo tras el anuncio sentirse «decepcionada» con las conclusiones de la EPA y aseguró que sus «vehículos diésel cumplen con todos los requerimientos regulatorios», reportó Reuters.
El hallazgo de la EPA se dio luego de que inició en septiembre de 2015 una serie de pruebas para detectar dispositivos cuyo fin fuese falsear los resultados de las pruebas de emisiones. Fue ahí que la oficina encontró al menos ocho piezas de software que no habían sido declaradas y las cuales modifican la manera en que un vehículo emite los gases contaminantes, detalló.
La noticia golpeaba las acciones de Fiat en la bolsa de Milán, donde las transacciones de esos papeles debieron ser suspendidas al desplomarse más de un 15%. Y, ahora, la firma podría afrontar una multa de 44,000 dólares por vehículo.
Fuente: Univision