La basura es un dolor de cabeza para las industrias y comercios del país, así como para los 2,442 municipios encargados de su recolección.
En el último lustro, industrias, comercios y municipios han comenzado a demandar servicios especializados y con tecnología de vanguardia para el manejo de residuos. Ello ha provocado que las empresas privadas dedicadas a este negocio –algunas con más de 20 años operando– experimenten un crecimiento constante y estable, pero que depende de una mayor conciencia social y de leyes y normas ambientales más estrictas.
Hoy existen en el país una docena de firmas formales que ofrecen un servicio profesional en el rubro y que cumplen con la normatividad vigente en materia de residuos sólidos urbanos. De estas, solo cinco tienen presencia nacional (PASA, Proactiva Medio Ambiente México, Grupo Red Ambiental, TECMED y Proterra de Grupo Domos) y prestan un servicio integral, desde la recolección hasta la transferencia, tratamiento y disposición final. En algunos casos llega hasta la generación de energía eléctrica en rellenos sanitarios.
El resto son firmas locales con servicio de recolección o transferencia, como Mobil Container, Ruta, Recolectora Industrial de Occidente, Sanirent, Selicsa y Trisa Comercial, mientras que Caabsa Eagle tiene la concesión del servicio de aseo público de la ciudad de Guadalajara.
Luego están las empresas municipales (más de 2,000) y un número indefinido de pequeñas empresas y negocios familiares que no reúnen los requerimientos mínimos. Estos operadores no cubren los residuos durante su transportación. Ya no digamos que dispongan de rellenos sanitarios apropiados. A la larga, esto se convierte en un problema ambiental, pues la basura recolectada acaba en cañadas o en tiraderos clandestinos al aire libre.
De acuerdo con información del INEGI y estimaciones de Promotora Ambiental (PASA) y PROACTIVA, anualmente se generan en México entre 40 y 45 millones de toneladas de basura, principalmente residuos sólidos, de los cuales 75% es considerado el mercado potencial de empresas formales, ya que son residuos generados en ciudades de más de 50,000 habitantes y zonas conurbadas.
Según estimaciones de PASA, 76% de los residuos del mercado potencial fueron generados por casas-habitación en los municipios (recolección doméstica) y 24% por industrias y comercios (recolección privada). La recolección de los residuos generados por industrias y comercios fue realizada por compañías formales en un 65% y el 35% por compañías informales; mientras que la recolección de residuos generados por casas-habitación se realiza directamente por los municipios en un 74%, y el 26% es concesionado al sector privado.
Bienvenida inversión privada
Carlos Bernardo Garza, gerente de Finanzas de PASA, asegura que el sector ha vivido una transformación en los últimos 20 años, con la llegada de empresas especializadas y la concesión del servicio por parte de los municipios: “Durante muchos años, la recolección, tratamiento, transferencia y disposición final de basura era una tarea exclusiva de los gobiernos municipales, que contaban con camiones que operaban a través de trabajadores sindicalizados y tiraderos al aire libre”. Señala que a veces contrataban una empresa para que construyera y manejara uno o varios rellenos sanitarios, pero esto cambió.
Hoy la tendencia apunta hacia la privatización de estos servicios con una mayor participación futura de empresas privadas, debido a que tienen mayor experiencia, infraestructura y tecnología, así como por el ahorro que genera al municipio (en nómina, infraestructura y mantenimiento) concesionar el servicio a un tercero. Garza estima que en el mediano plazo se incrementará paulatinamente el número de municipios que concesionen estos servicios.
Hernán Mateus Valdés, director de Desarrollo de Negocios de Proactiva Medio Ambiente México, señala que el crecimiento de la industria privada de recolección y disposición final de basura en México ha sido lento pero constante en el último lustro, sobre todo en el norte del país, donde ciudades importantes como Monterrey tienen concesionados dichos servicios, en cierta medida influenciadas por las poblaciones fronterizas de Estados Unidos.
El ejecutivo indica que 380 municipios urbano-industrializados con más de 50,000 habitantes hoy carecen de un servicio de recolección privada, por lo que en un futuro no muy lejano podrían concesionar el manejo de sus residuos sólidos.
Mateus reconoce que México es muy eficiente en recolección de basura (“andamos arriba del 90-94%”), pero no así en la disposición final: “El 95% de lo recolectado termina en basureros clandestinos”.
Por ello es necesario que los municipios inviertan en rellenos sanitarios, aquellos que cumplen con la normatividad vigente, pues utilizan geomembranas para impedir o prevenir el paso de fluidos tóxicos que contaminen el suelo o los mantos freáticos.
Además, después de cierta cantidad de basura, se coloca una capa de tierra para evitar la fauna nociva y la contaminación.
Fundada hace 20 años, Proactiva Medio Ambiente México es hoy el segundo recolector privado de residuos sólidos en el país. Tiene 14 concesiones municipales y cerca de 3,000 empleados que atienden a más de siete millones de habitantes. “Seguiremos participando en las licitaciones de municipios, pero estamos conscientes que necesitamos adquirir empresas o proyectos y hacer alianzas”, apuntó Mateus.
Fuente: Alto Nivel