Tener un espacio agradable para leer es fundamental. Tomando esto en cuenta, se construyó una biblioteca edificada en un basurero que promete convertirse en una de las mejores en el mundo.
La biblioteca edificada en un basurero
Fue edificada sobre un basurero y cuenta con aparatos que permiten traducir las palabras escritas en braille, talleres inclusivos, clases de yoga, entre otras iniciativas y se encuentra en Sao Paulo.
La tecnología con la que cuenta, le permitió ser una de las finalistas del Premio Biblioteca Publica 2018. Una nominación inédita que reconoce el labor de los involucrados en construir una biblioteca en un terreno que sirvió como un gran depósito de basura a cielo abierto.
«Esa nominación inédita es particularmente importante para nosotros aquí en Brasil, porque estamos junto a finalistas de países que tienen una fuerte tradición de invertir en la lectura, cultura y biblioteca», explica Pierre André Ruprecht, director de SP Leituras, la organización que gestiona el espacio.
La biblioteca edificada en un basurero, apuesta por cambiar el concepto tradicional y hacer de este espacio algo vivo, interactivo y novedoso.
Como en el caso de las estanterías llenas de libros, que le ceden el protagonismo a una tienda de hilo que ocupa el centro del salón de tres plantas, en donde se encuentran ubicadas algunas hamacas en las que las personas pueden leer, charlar e incluso dormir una siesta.
Mientras que la luz natural del sol y el aire del parque abrazan a las diferentes secciones que conforman a la biblioteca edificada en un basurero, y a cada uno de sus sofás y sillones.
La biblioteca edificada sobre un basurero que cambió el diseño tradicional de estos espacios de lectura.
Además, este lugar rompe con la regla de mantener el silencio absoluto en las instalaciones porque diseñó un espacio para cada tipo de usuario.
«La biblioteca es una institución milenaria y solo ha sobrevivido hasta ahora porque en los momentos cruciales ella supo cómo transformarse. Y a lo largo de la historia, ha sufrido algunas bastante grandiosas», afirma Ruprecht.
¿Qué más hay en esta biblioteca?
Este nuevo espacio cuenta con clubes de lectura y sesiones de cine, fotografía, escritura y más. Los usuarios de mayor edad, también tienen la posibilidad de participar y aprender el uso de las nuevas tecnologías.
“La inclusión social también es una prioridad en las bibliotecas contemporáneas. Aparatos capaces de traducir palabras escritas al braille, convertir libros en audio, hojear páginas o imprimir imágenes en relieve son algunas de las herramientas disponibles para los usuarios con discapacidad”, comparte.
Los elementos con los que cuenta la biblioteca permiten impulsar la cultura y la literatura clásica a las nuevas generaciones y las educa respecto a la tendencia de las fakenews.
«El volumen de información que está disponible es absurdo y por encima de nuestra capacidad de procesamiento. Entonces el papel de la biblioteca y sus profesionales es ayudar a seleccionar la información que puede ser importante», recalca Ruprecht.
Esta biblioteca edificada» en un basurero se está posicionando como una herramienta cultural que acerca a las personas de todas las clases sociales. Esto ayuda a generar un impacto social muy positivo.
