El consejo de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) trabajó ayer sobre la integración del sistema eléctrico balear en el mercado eléctrico ibérico y los biocarburantes y biolíquidos. No se pronunció sobre el asunto más candente en el sector energético: el pacto de sindicación de acciones en la petrolera Repsol entre la empresa estatal mexicana Pemex (9,8% del capital) y el grupo constructor Sacyr (20%). Un portavoz, citado por Reuters, aseguró que el órgano regulador decidirá sobre la petición de Repsol para que investigue la operación «en las próximas semanas».
Repsol ha solicitado a la CNE que, en aplicación de la llamada Función 14, abra un expediente para investigar si el acuerdo Sacyr-Pemex puede afectar a la seguridad de suministro o a las actividades energéticas reguladas que, según la petrolera española, lleva a cabo a través de su participada Gas Natural (31%). La Comisión tiene margen de tiempo para tomar una decisión, puesto que dispone de tres meses a partir de la petición que Repsol planteó a principios de septiembre.
Con las espadas en alto, para cuando se pronuncie la CNE estarán más claras las posiciones de todos los actores (léase accionistas) implicados en la pugna. El próximo día 28 está prevista la reunión del consejo de Repsol en la que los socios sindicados, Sacyr y Pemex, así como el otro gran accionista, Caixabank (12,8%), tendrán que aclarar su postura en el nuevo escenario que se abre en la compañía petrolera.
El acuerdo de sindicación de acciones entre Sacyr y Pemex también ha revuelto las aguas en México. Más de 70 legisladores de partidos de izquierda y decenas de académicos pidieron ayer, según Efe, el cese del director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Juan José Suárez Coppel, por violar la Constitución al permitir inversión privada en la producción de crudo y comprar sin autorización títulos de la española Repsol.
Los legisladores de los partidos de la Revolución Democrática (PRD), del Trabajo (PT) y Convergencia (C), y figuras como el académico René Druker, la escritora Laura Esquivel y el antropólogo Alfredo López Austin demandaron «la remoción del actual director de Pemex» en una publicación pagada en el diario La Jornada. Entre otras acusaciones, los firmantes señalaron que Suárez Coppel cometió «una nueva ilegalidad» al comprometer «el futuro de Pemex y más de 20.000 millones de pesos (unos 1.490 millones de dólares) en la compra de acciones de Repsol», vinculándose con una empresa española (Sacyr) y «sin tener siquiera el aval del Consejo de Administración».
Los legisladores se preguntaron de dónde se sacaron estos recursos si se había dicho que Pemex estaba al borde de la quiebra y con enormes problemas financieros para invertir en una empresa extranjera. «La aberrante conducción del director de Pemex debe cesar. La entrega de recursos de la nación a empresas privadas nacionales y extranjeras, violentando la Constitución y las leyes, debe parar», concluyeron.
Fuente: Elpais.com
Por: S. Carcar.
Publicada: 23 de septiembre de 2011.