El gas que más se emite en México es el dióxido de carbono, con 71% de emisiones; seguido del metano, con 21%. Tan solo en 2015, en el país, emitimos 683 millones de toneladas de gases efecto invernadero a la atmósfera, esto de acuerdo con el Inventario Nacional de Emisiones de Gases y Compuestos de Efecto Invernadero presentado por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC).
Del total de las emisiones, 64% corresponden al consumo de combustibles fósiles; 10% se originan por los sistemas de producción pecuaria; 8% provienen de los procesos industriales; 7% se emiten por el manejo de residuos; 6% por las emisiones fugitivas de la extracción de petróleo, gas y minería; y 5% se generan por actividades agrícolas.
De ahí la importancia de tomar medidas adaptadas a cada una de las industrias, hacer una evaluación y medición de emisiones en los distintos procesos, e invertir en tecnología que ayude a minimizar o eliminar por completo el impacto ambiental.
Cooperativa La Cruz Azul, como parte de la industria cementera tiene diversos esfuerzos en el tema.
A través de sus múltiples plantas de producción y procesos para la elaboración del cemento, ha emprendido una cruzada tecnológica que contribuye a la disminución o eliminación de emisiones de CO2. Para llevarla a cabo invierte en los programas y desarrollos tecnológicos más avanzados a nivel mundial, fortaleciendo su compromiso con el medio ambiente, su cultura de bienestar, y de protección a los recursos naturales.
La Cruz Azul a través de sus múltiples plantas de producción para la elaboración del cemento ha emprendido una cruzada tecnológica que contribuye a la disminución de emisiones de CO2. Conoce 5 ecoeficiencias aquí…
A continuación te compartimos cinco ecoeficiencias que reducen el impacto ambiental en las plantas y comunidades de La Cruz Azul.
Ecoeficiencias que reducen el impacto ambiental
Co-procesamiento de residuos: la organización tiene un programa enfocado al reciclaje energético o co-procesamiento de residuos peligrosos y no peligrosos, de manejo especial, que se incorporan como materia prima alterna o como combustible alterno en algunas de sus unidades de calcinación.
Este proceso se realiza cumpliendo con la normatividad ambiental vigente y contribuye a reducir los daños asociados al cambio climático debido a la generación de gases que ocasiona el mal manejo de residuos. Además colabora con otros pequeños y grandes generadores de residuos al ofrecer servicio de co-procesamiento autorizado por la SEMARNAT.
Tratamiento de aguas residuales: en distintas plantas, Cruz Azul cuenta con un sistema de tratamiento de aguas residuales. Las aguas que resultan de la descarga de los servicios es tratada y descargada a un cuerpo receptor y se reutiliza en el riego de áreas verdes. La calidad de agua del efluente cumple con la normatividad ambiental vigente.
Bajo el mismo tema de aprovechamiento de agua, tiene un sistema de captación de agua pluvial para uso industrial, a través de una red de canalización y estanques de almacenamiento conectados a los equipos de proceso.
Medición isocinética: tiene un programa llamado medición isocinética a fuentes fijas y perimetral de partículas, el cual consiste en la realización de un análisis de emisiones provenientes de las fuentes fijas del proceso de elaboración del cemento hidráulico en algunas de sus plantas. Esta actividad tiene el objetivo de verificar el cumplimiento de los límites que establece la normatividad.
Los parámetros que se miden son: partículas, óxidos de nitrógeno, bióxido de azufre, monóxido de carbono, ácido clorhídrico, hidrocarburos totales, metales pesados, dioxinas y furanos. Los resultados del monitoreo son reportados anualmente en la Cédula de Operación Anual (COA).
Ahorro de energía eléctrica y agua: la organización tiene una gerencia de optimización para el ahorro de energía eléctrica y agua, la cual tiene el objetivo de participar a través de la investigación en el desarrollo y la gestión de nuevas tecnologías que disminuyan el uso de ambos elementos, tanto en el proceso productivo como en el uso de las instalaciones.
Excelencia ambiental: para asegurar una correcta gestión, la Cooperativa se somete a un proceso de auditoría ambiental que permite el refrendo del Certificado Industria Limpia, así como el Reconocimiento a la Excelencia Ambiental.
Ambas distinciones permiten ser parte de una iniciativa nacional de cuidado ambiental. Es así como se ratifican los esfuerzos contra el calentamiento global, la conservación de los recursos naturales, se beneficia a las comunidades a nivel local, se mejoran las condiciones de trabajo y se garantiza un proceso productivo de excelencia.
La Cruz Azul es una organización comprometida con la ecología y la educación ambiental, es por ello que además de los programas señalados, lleva a cabo cruzadas permanentes de culturalización en comunidades aledañas a sus plantas, donde se enseña y comparte con las nuevas generaciones la consciencia sobre el cuidado del agua, reforestación, división de basura y demás acciones que contribuyen al bienestar común y de la naturaleza.
Finalmente, cabe resaltar que por XIV años consecutivos, Cooperativa La Cruz Azul ha sido galardonada como Empresa Socialmente Responsable, distintivo que comprende también sus actividades y programas permanentes en pro del medio ambiente.
Me parece que las actividades de tratamiento de aguas residuales y monitoreo de partículas no son proyectos ecoeficientes, sino que son parte del cumplimiento ambiental y normativo que debe tener la empresa.
Por ecoeficiencia se entiende aquellas estrategias empresariales con beneficios ambientales y económicos, donde se busca que al ahorrar en insumos se esté reduciendo el impacto y los costos, se genere más valor en la empresa. Esto se realiza a través de la reingeniería de procesos, rediseño de productos y búsqueda de nuevos mercados para cerrar los ciclos de materia y energía entre las industrias, revalorizando los insumos o residuos. La ecoeficiencia se puede medir como el cociente del valor de los productos o servicios generados entre la suma de las presiones ambientales producidas.
En este caso, el co-procesamiento sí es un proyecto ecoeficiente, al igual que el sistema de gestión de la energía y la captación de agua pluvial.