Los vertederos de basura y su descontaminación representan un gran reto para lograr un manejo de residuos de manera 100% sustentable. Éstos lugares en donde todos los días llegan miles y miles de toneladas de basura también representan un foco de contaminación e infecciones importante. Por ello, acuerdo a la información obtenida en The Guardian, estudios recientes han demostrado que los procesos destinados a descontaminar el agua residual de los vertederos puede contener químicos nocivos y algunos aumentan los niveles de contaminación. ¡Te contamos los detalles a continuación!
Las PFAS en los vertederos de residuos
Los vertederos de residuos son una fuente importante de sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS). Son una familia de aproximadamente 15.000 sustancias químicas artificiales con propiedades antiadherentes que se utilizan en una amplia gama de productos de consumo y procesos industriales. Pueden tardar miles de años en descomponerse en el medio ambiente y se ha descubierto que las pocas que se han estudiado en detalle son tóxicas.
Éstas sustancias se conocen como los «químicos eternos» porque son extraordinariamente persistentes en el medio ambiente y en nuestros cuerpos. De acuerdo a la información de la European Enviroment Agency, pueden provocar problemas de salud como daños hepáticos, enfermedad tiroidea, obesidad, problemas de fertilidad y cáncer
La contaminación por PFAS está muy extendida y se ha encontrado en las zonas más remotas del mundo, y se cree que todos los ciudadanos estadounidenses la tienen en la sangre. Recientemente, un estudio de la Universidad Metropolitana de Manchester, mostró que las plantas de tratamiento diseñadas para limpiar los desechos líquidos pueden, en cambio, aumentar los niveles de PFAS prohibidos, como PFOA y PFOS , en algunos casos hasta en un 1.335%.
Los lixiviados son los responsables
El lixiviado es un líquido que se forma cuando el agua pasa por los vertederos de residuos. Es el líquido resultante del agua de los alimentos en descomposición, la lluvia, las aguas residuales industriales o domésticas. Éstos pueden contener compuestos orgánicos disueltos, sólidos en suspensión, varios ácidos, metales tóxicos y microorganismos causantes de enfermedades. Especialmente cuando estas fuentes no se tratan adecuadamente antes de desecharlas o si entran en contacto con material del vertedero que contiene contaminantes orgánicos.
Utilizando datos de una investigación de la Agencia de Medio Ambiente sobre los residuos líquidos de los vertederos, conocidos como lixiviados, el Dr. David Megson de la Universidad Metropolitana de Manchester, coautor del estudio, descubrió que en lugar de eliminar los productos químicos prohibidos PFOS y PFOA, las plantas de tratamiento en realidad los están creando.
Al Dr. Megson le preocupa que la comprensión de lo que está sucediendo en los vertederos del Reino Unido sea deficiente y que el monitoreo solo se centre en unos pocos PFAS específicos ya que solo se obtuvo una pequeña e instantánea muestra de lo que realmente hay en los vertederos de residuos y el impacto que puede tener.
El estudio analizó el lixiviado de 17 vertederos históricos y operativos, apenas una fracción del total de todo el Reino Unido, Pippa Neill, de Ends Report, coautora del estudio, dijo que:
“Con cientos de operadores de vertederos a los que se les permite legalmente descargar su lixiviado tratado al medio ambiente, existe una necesidad urgente de realizar más investigaciones para que los PFAS puedan eliminarse adecuadamente».
Pippa Neill, coautora y colaboradora en Ends Report,
Según la Dra. Sara Brosché, asesora de la Red Internacional para la Eliminación de Contaminantes, también existe una necesidad urgente de prohibir todos los PFAS a nivel mundial, ya sea a través del Convenio de Estocolmo existente o de un nuevo tratado mundial sobre PFAS.
“Los fabricantes sabían que los PFOS y PFOA eran tóxicos desde el principio de su uso en productos de consumo, y siguen envenenando el medio ambiente y nuestros cuerpos muchos años después de haber sido regulados. En la actualidad se utilizan multitud de PFAS y hay poca o ninguna información pública sobre dónde se utilizan o sus efectos sobre la salud”.
Dra. Sara Brosché, asesora de la Red Internacional para la Eliminación de Contaminantes
Un intento por detenerlo
La Comisión Europea está considerando una propuesta innovadora para regular miles de PFAS como una sola clase, algo que está siendo ferozmente cuestionado por la industria de los PFAS. El Reino Unido no ha seguido el ejemplo de la UE, lo que llevó a docenas de los principales expertos mundiales en PFAS a escribir directamente a los ministros del Reino Unido instando al gobierno a «adoptar un enfoque más ambicioso y seguir la ciencia… Regular todos los PFAS como un solo grupo es la única manera de abordar la contaminación por PFAS».
El Dr. Shubhi Sharma, investigador científico de la organización benéfica Chem Trust, afirmó:
“Las emisiones de PFAS de los vertederos pueden contaminar las aguas subterráneas y superficiales circundantes y están vinculadas a graves riesgos para la salud, como el cáncer de riñón y testículos. El gobierno del Reino Unido debe tomar medidas inmediatas para regular todo este grupo de PFAS”.
Dr. Shubhi Sharma, investigador científico de la organización benéfica Chem Trust
Urge regulación
El Dr. Daniel Drage, profesor asociado de la Universidad de Birmingham, también está preocupado porque lo mismo está sucediendo en una variedad de sistemas de tratamiento. Se considera fundamental que identificar otros procesos de tratamiento que eliminen los PFAS de los lixiviados antes de que se liberen al medio ambiente ya que se trata de un problema de salud pública mundial que cuesta miles de millones de libras y es probable que vaya más allá del gasto gubernamental.
«Yo sugeriría que las industrias que se han beneficiado sustancialmente del uso de PFAS durante el último medio siglo tienen el deber moral de proteger a las generaciones futuras de las consecuencias de estos usos”.
Dr. Daniel Drage, profesor asociado de la Universidad de Birmingham
Según la profesora Kate Spencer, de la Universidad Queen Mary de Londres, es probable que el cambio climático agrave la contaminación de los vertederos. En particular, en el caso de los vertederos históricos que no están revestidos, estos productos químicos PFAS pueden entrar en las aguas superficiales y subterráneas con posibles consecuencias para la salud humana y ecológica. Es probable que esto aumente a medida que aumente la gravedad y la frecuencia de las inundaciones.
La Agencia de Medio Ambiente confirmó que se está trabajando estrechamente con la industria de los vertederos y que se están realizando más investigaciones sobre los PFAS dentro de la masa de residuos de los vertederos, los procesos de tratamiento y las consecuencias del tratamiento al que se somete el lixiviado.