Se entiende por sustentabilidad a la capacidad que tiene una sociedad de hacer el uso de forma consciente y responsable de sus recursos, cuyo propósito es no agotarlos o exceder su capacidad de renovación. Esto permite garantizar que las futuras generaciones cuenten con los recursos que tienen en la actualidad.
Hoy en día los consumidores son cada vez más conscientes en ser sustentables y las empresas se encuentran más interesadas en apostar por la Responsabilidad Social (RSE) y en convertirse en agentes de cambio que aporten positivamente tanto al planeta como a la sociedad.
Una empresa que ha comprendido la importancia de la sustentabilidad y la RSE es Ternova —conocida anteriormente como Termoencogibles—, compañía salvadoreña dedicada a la realización de empaques de todo tipo de productos, que de la mano de su líder, ha consolidado una fuerte transformación en los rubros antes mencionados.
En Expok, nuestro director general, Edgar López, tuvo la oportunidad de platicar con Rodrigo Tona, CEO de Ternova, quien compartió con la audiencia las prioridades sustentables de la corporación a su cargo.
Te compartimos la entrevista completa
Rodrigo Tona, el líder de una empresa innovadora
Graduado en la North Carolina State University, Rodrigo Tona es ingeniero industrial por esta institución, y cuenta con un MBA. Desde que tomó la dirección de Ternova en 2010, ha luchado por transformarla en una empresa sustentable e innovadora. Asimismo, ha dedicado su trabajo a “perseguir un futuro sostenible, a través de la economía circular, estrategias de innovación relacionadas con emprendimientos adaptativos y disruptivos”.
La visión de Tona lo ha llevado a ser considerado un referente en cuanto a cuestiones de sustentabilidad en su país, así como a ser reconocido a nivel internacional. “Mi trabajo ha sido entender que la sustentabilidad no es una opción: o nos transformamos o moriremos”, señala Tona.
Del packing a Ternova
Termoencogibles, hoy Ternova, nació de manera sencilla, como lo comenta Rodrigo Tona en entrevista.
Nuestro grupo nace de un emprendimiento muy humilde de tres hermanos que heredan una máquina […] y que empiezan a jugar con un material nuevo que se llamaba polietileno y se ponen hacer un tubo.
Rodrigo Tona, CEO de Ternova.
Tona y sus hermanos, por medio de una cuchilla que se coloca en el fuego, comenzaron a seccionar el tubo para convertirlo en una bolsa. Lo que provocó que se aventuran a darle un uso en los sacos del fertilizante henequén, creando un empaque flexible e instaurando un nicho en la industria.
Nacimos como un emprendimiento por coincidencia para empezar a hacer una bolsa a mano o liner industrial a mano.
Rodrigo Tona, CEO de Ternova.
Desde ese momento, el emprendimiento se ha convertido en una empresa, que hoy —como lo describe el CEO— se ha vuelto a enfocar, y se está constituyendo como un gran jugador corporativo en el crecimiento regional. Actualmente opera en siete países, tiene 2 mil colaboradores y cuenta con seis plantas de fabricación, una en Vietnam, un centro de distribución en República Dominicana y oficinas comerciales en México y Estados Unidos.
Emprendedores conscientes y la reinvención
Para Tona, los valores familiares con los que el negocio inició, fueron los responsables de que Ternova mirara la responsabilidad que sus actividades tenían, además de que siempre se contó con rasgos de sustentabilidad ambiental, social y económica. Esto los llevó a una reinvención del core central de su negocio, el packing.
Y es que pasaron de un modelo tradicional —en cual lo más importante era la creación de valor y la expansión de la empresa—, a uno que les ayudara a cambiar su planeación a futuro. Por ello, redefinieron su propuesta de valor que fue de ofrecer una solución industrial (vender empaques) a entender que Ternova es el intermediario en la interacción del consumidor final con los productos.
Ternova comenzó a crear negocios de futuro con un modelo que apuesta por conservar el negocio de hoy, pero procurando construir otros. Esto a través de una gobernanza sólida y de implementar un triple impacto permanente, el cual considera los tres pilares de cualquier iniciativa ESG. Es decir:
- Impacto social.
- Impacto económico
- Impacto ambiental.
El triple impacto para nosotros se define como la capacidad de generar un negocio que tenga un impacto económico significativo.
Nos gusta ser competitivos en el mercado, pero esto lo tenemos que generar con un impacto social en el lugar en el que operamos y con quienes lo hacemos. No lo podemos hacer en detrimento del medio ambiente, es una ecuación que hay que balancear constantemente.
Rodrigo Tona, CEO de Ternova.
El modelo paralelo
En la actualidad, muchas empresas han buscado incluir e invertir en equipos dedicados a innovar, por lo que Ternova —mirando cómo funcionan las corporaciones digitales— decidió implementar un modelo paralelo que implica tener un grupo trabajando en innovación disruptiva de futuro, esto sin alejarlos de quienes trabajan con el negocio del hoy.
Eventualmente a esto le llamamos crear una cultura ambidiestra, una organización capaz de optimizar el mundo de hoy, de ser muy eficiente con la excelencia operacional, pero a su vez tener gente de forma permanente buscando oportunidades de futuro, a través de un sistema que permita crear oportunidades.
Rodrigo Tona, CEO de Ternova.
Hoy en día, los productos plásticos sufren una dicotomía constante: por un lado son golpeados debido al impacto medioambiental que generan, y por otro, son casi indispensables en cualquier sector. Ante ello, Tona señala que es necesario reinventarse, ya que en caso de no hacerlo, la industria a la que pertenece podría desaparecer.
Nosotros responsablemente entendemos el rol que tenemos en el mercado y comprendemos que el desarrollo sostenible de la humanidad se da cuando todos los actores se ponen de acuerdo con lograr soluciones.
Rodrigo Tona, CEO de Ternova.
El trabajo de innovación ha traído grandes resultados para Ternova que cuenta con socios de la talla de Unilever. En 2014 se convirtió en la primera empresa salvadoreña en ser carbono neutro, asimismo, tiene como objetivo ser la compañía de packing más amigable con el ambiente.
Nos hemos trazado la meta de dejar de ocupar plástico de fuente virgen para el año 2030, y eso nos obliga a reinventar toda la cadena de suministro del negocio completo y crear una industria de materiales del futuro que no existe.
Rodrigo Tona, CEO de Ternova.
El ejecutivo señala que el papel de las empresas es fundamental para construir el desarrollo sostenible de la humanidad, por lo que se tiene que retar a producir rentabilidad a los accionistas, ofreciendo soluciones y productos que no tengan un impacto negativo ni social ni ambiental, tal y como lo está haciendo Ternova.
