Esta columna es patrocinada por Cuauhtémoc Moctezuma
Durante los últimos seis años, las débiles cosechas causadas por un mal uso del agua, son la amenaza principal para aumentar los precios, reducir utilidades, alterar recetas e inclusive cerrar las cervecerías. Y es que desde el 2009, la aguda sequía que azotó diversas regiones del país, provocó fuertes crisis en el campo Mexicano, siendo la agricultura y la ganadería los sectores más afectados. Ante ello, el cultivo de cebada no fue la excepción.
¡Comparte este post en tu Facebook!
Es por ello, que un grupo de cerveceros estadounidenses ha hecho una apuesta por el uso de la hidroponía coordinado con la clonación de lúpulos en invernaderos.
Se calcula que actualmente, la escasez de lúpulo rebasa el 40 por ciento, además de triplicar el costo de producción, alcanzando precios de hasta 60 dólares por libra, lo que significa un aumento de precio cercano al mil por ciento.
Tomando en cuenta que el lúpulo es la pieza clave para la conservación y exportación de la cerveza, además de darle el sabor amargo de las cervezas claras, la hidroponía se ha convertido en la pieza clave para rescatar dichos cultivos.
Fue a mediados del 2009, cuando el grupo de científicos de Pittbourg, Space Farm Enterprise, promovió la campaña “Sin lúpulos no hay cerveza”, donde se comenzó a sustituir las plantaciones por medio de la hidroponía, ya que una planta normal tarda hasta cuatro años en dar frutos, de ahí la optativa a la clonación, en donde el producto germina en tan solo cuatro meses.
¿Qué es y cómo se utiliza la hidroponía?
La hidroponía es una alternativa para la agroindustria mexicana. Permite obtener altos rendimientos con 60 por ciento menos agua en comparación con el esquema a cielo abierto.
En México, aproximadamente 78 por ciento del agua se emplea para la agricultura, 11 por ciento para consumo residencial y 8 por ciento para la industria, según datos de la Academia Mexicana de las Ciencias. Actualmente, la agricultura enfrenta una de las sequías más crudas en las últimas siete décadas. Hasta el momento, Sinaloa, Chihuahua y Durango son los estados más afectados del país.
De acuerdo a la Asociación Hidropónica Mexicana A. C., se calcula que para el 2050, el 70 por ciento de la población vivirá en zonas urbanas, lo que significa que la producción agrícola no tendrá suficiente abastecimiento, de no optar por medidas que disminuyan considerablemente el uso del agua.
Si encontraste interesante este post, compártelo en Google+
A pesar de que la tecnología para un esquema hidropónico es exportada de países europeos, la inversión se calcula en 270 pesos por metro cuadrado, trayendo consigo beneficios como:
– Reducción de costos de producción en forma considerable.
– No depende de los fenómenos meteorológicos
– Permite producir cosechas fuera de temporada.
– Además requiere mucho menor espacio y capital para una mayor producción.
– El ahorro de agua es bastante significativo puesto que ésta se recicla.
– Este método no usa maquinaria agrícola (tractores, rastras, etc.), lo que permite una mayor limpieza e higiene en el manejo del cultivo, desde la siembra hasta la cosecha.
– Libera al cultivo de parásitos, bacterias, hongos y contaminación, lo que repercute de manera positiva en la eliminación de la contaminación y riesgos por la erosión de la tierra.
